Titanic

Después de que casi alcanzara el Oscar con las puntas de los dedos, con dos nominaciones al Oscar en un mismo año por Braveheart y Apolo 13, ambas de 1995, James Horner consiguió la apreciada estatuilla dorada dos años después gracias a Titanic, la superproducción de James Cameron que pulverizó todos los récords de taquilla habidos y por haber hasta que el mismo director repitió la gesta con Avatar (2009).

Horner y Cameron habían trabajado previamente juntos en Aliens (1986), de la que el compositor no guardaba un grato recuerdo, a pesar de suponerle su primera nominación al Oscar en la categoría de mejor score original. Titanic los volvió a reunir al cabo de 11 años. Y 11 fueron también los premios de Hollywood obtenidos por la película, entre ellos el de mejor banda sonora y el de mejor canción.

El de Titanic es también el score más vendido de todos los tiempos, aunque en ello influyó sin duda la popularidad de la canción «My Heart Will Go On», compuesta por Horner e interpretada por Celine Dion, que únicamente aparecía en los títulos finales, si bien la melodía de ese efectivo tema  aparecía acompañando los momentos más románticos de la pareja protagonista.

Pero la partitura de Horner no se queda ahí y contiene mucho más, como un gran tema de carácter optimista y magnificente para el propio barco, donde se combina música orquestal y electrónica, así como piezas de raíces irlandesas para los pasajeros de tercera clase y temas incidentales para las escenas de la tragedia. Aunque la mayoría de los aficionados no considere Titanic la mejor obra de Horner, es innegable su impacto popular y su valor a la hora de crear afición por la música de cine.