Puntúa esta banda sonora

 

 

  War Horse

(Caballo de batalla)
John Williams
     
Año:   2011
Sello:   Sony Classical
Edición:   Normal
Nº Tracks:   16
Duración:   65:26
     
Ficha IMDB
 
Web del Compositor
 
 

Reseña por:
Óscar Giménez

 
1. Dartmoor, 1912 (03:35)
2. The Auction (03:34)
3. Bringing Joey Home and Bonding (04:42)
4. Learning the Call (03:20)
5. Seeding and Horse Vs. Car (03:33)
6. Plowing (05:10)
7. Ruined Crop and Going to War (03:29)
8. The Charge and Capture (03:21)
9. The Desertion (02:33)
10. Joey’s New Friends (03:30)
11. Pulling the Cannon (04:11)
12. The Death of Topthorn (02:45)
13. No Man’s Land (04:35)
14. The Reunion (03:55)
15. Remembering Emilie and Finale (05:07)
16. The Homecoming (08:06)
 
 

«Dartmoor, 1912»

«Plowing»

«No Man’s Land»

«The Homecoming»

 


John Williams demuestra que la edad de 80 años no le afecta y que sigue en plena forma. War Horse es un trabajo excelente, inspirado y variado. Si no le doy la máxima puntuación es porque no estoy totalmente seguro de que esté a la altura de tantas y tantas obras maestras de Williams que sí la merecen, aunque mucha gente opine que este es un clásico instantáneo.


No hay nada negativo que resaltar. Es cierto que no es un trabajo que pueda calificarse de innovador, pero tampoco es lo que se le pedía para una película de este tipo. Quizás la ausencia de un tema principal evidente  podría entenderse como un defecto, aunque eso es algo puramente subjetivo.


Hay muchos. El corte inicial, “Dartmoor, 1912”, es un genial anticipo de lo que está por venir. Los fragmentos triunfalistas de “Plowing” con Joey tirando del arado o la galopada entre bombas de “No Man’s Land” se encuentran entre lo más épico. A la hora de quedarse con un solo corte, “The Homecoming” ejerce de perfecto compendio de lo que es esta banda sonora.

 
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Una banda sonora de ida y vuelta
     

altEn lo que atañe a música de cine hay que reconocer que los caballos han dado mucho de sí. Hay bandas sonoras equinas sensacionales. Así, a bote pronto, no puedo evitar recordar la belleza y elegancia de Black Beauty, de Elfman. Tampoco el gran trabajo de Thomas Newman para The Horse Whisperer y el de su primo Randy para Seabuiscuit. Tampoco podemos olvidar The Black Stallion, de Carmine Coppola, ni The Black Stallion Returns (aquí titulada Como uña y carne), con música de Georges Delerue. Hay nombres propios como Hidalgo, Dreamer o Flicka que resuenan con música de cine, sea de James Newton Howard, John Debney o Aaron Zigman, respectivamente. Siguiendo con el repaso, me encanta la adrenalina que desbordaba aquel “Run Free” de Spirit, firmado por Hans Zimmer, o “The Big Race” de Racing Stripes, a cargo de Mark Isham. Vale… era una cebra y no un caballo, pero corría en un hipódromo, ¿no? Incluso más allá en el tiempo uno puede recordar como galopaba y cortaba el viento cuando pasaba por el puerto caminito de Jerez “Mi jaca”, con voz de Estrellita Castro. En este punto sí que parece que se me ha ido la olla por completo, pero debéis saber que esa canción formó parte de la banda sonora de una película de Benito Perojo de 1939 titulada Mariquita Terremoto. ¡Ahí es ná!

altA lo que iba… pocos meses antes de convertirse en octogenario, John Williams ha añadido una nueva banda sonora al elenco solípedo, este War Horse que una proporción nada desdeñable de aficionados a la música de cine –y también los críticos de la IFMCA– consideran el mejor score de 2011.

Tras unos pocos años de descanso compositivo, Williams reapareció a lo grande a finales de ese año. Es posible que a estas alturas ya solo se comprometa con Steven Spielberg, pero como este tenía en cartera dos grandes estrenos –The Adventures of Tintin y War Horse, como todos sabéis de sobra-, su inseparable compositor llegó, vio y venció.

El 2011 ha sido un buen año en música de cine. Unos cuantos compositores de primera línea nos dejaron muy buenos trabajos. Pero resurgió John Williams y volvió a demostrar que parece jugar en otra liga. Si el score de Tintin es magnífico, el de War Horse no lo es menos; dos bandas sonoras que se hicieron sitio inmediatamente entre lo mejor del año. Sendas nominaciones al Oscar respaldan esta afirmación y han convertido a Williams en el compositor que más nominaciones ha conseguido a lo largo de la historia.

La epopeya de Joey
altPero vayamos con War Horse. Lo que ha hecho Spielberg es adaptar una novela de 1982 firmada por Michael Morpurgo que hace unos años también se estrenó como obra teatral en Londres.  El protagonista es un caballo llamado Joey, un magnífico purasangre que compra en una subasta el granjero Ted Narracott (Peter Mullan), aun sabiendo que el no es el animal idóneo para los trabajos de campo. Pese a ello, su hijo Albert (Jeremy Irvine) se entusiasma con Joey y lo adiestra. Entre el caballo y el joven se forja un sólido vínculo que únicamente rompe la llegada de la primera guerra mundial.

El padre se ve obligado a vender el caballo al ejército británico. A partir de ahí, su trayectoria como caballo de guerra –o de batalla, si queréis- va atravesando sucesivas historias, con diferentes dueños y situaciones, durante los años que duró la contienda.

Joey va con los ingleses a Francia, pasa a manos del ejército alemán en un par de ocasiones, convive durante breve tiempo con un abuelo y una nieta en el campo francés, regresa con los aliados… y así transcurren sus aventuras hasta que llega la paz.

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La partitura de Williams
Como era de esperar, John Williams firma un score espectacular. Hay a quien le recuerda su partitura para Far and Away. Otros la ven más próxima a Born in the Fourth of July. La verdad es que algunos elementos celtas recuerdan a la primera, pero también encuentro que algunos temas entroncan más con el estilo americano de Aaron Copland y Jerome Moross, así como de su discípulo Elmer Bernstein. En este sentido, hay fragmentos del score de War Horse que me recuerdan también a algunos temas –no me refiero a la fanfarria principal- de The Cowboys, aquel trabajo de Williams de 1972 que protagonizó John Wayne. Y para acabar de establecer asociaciones sonoras, el tema de la guerra de War Horse –del que escribo un poco más abajo- me trae a la cabeza la trompeta solitaria de JFK.

altLa banda sonora de War Horse es rica en material temático que el compositor desgrana a lo largo de la cinta, muy buenos temas que en su gran mayoría están asociados al propio caballo. Sobre este punto hay que subrayar que la película esta narrada desde la perspectiva del propio animal. Así que el papel de la música es dotar a Joey de una dimensión humana. La música ejerce de conexión entre lo que siente –o piensa- el animal protagonista y el espectador. Joey no habla, pero sus acciones están reforzadas con la música de Williams, que nos transmite, según convenga en cada escena, su esfuerzo, su pasión, su tristeza, sus miedos, su afecto por las personas que cuidan de él, incluso su sentido del honor y del deber.

¡Atención: Spoilers a partir de aquí!

 Los temas de War Horse

Llegados a este punto, es difícil decir cuál es el tema principal de la banda sonora. De hecho, hay varios leitmotivs que podrían considerarse como tales. Ni siquiera se puede hablar de un “tema de Joey” porque, como ya he dicho, tiene varios con funciones distintas. Por otra parte, reconocer que hay múltiples leitmotivs que escuchamos en repetidos momentos es más o menos sencillo, pero ponerles nombre y determinar qué simbolizan es una labor más difícil y, desde luego, arbitraria. Otras reseñas de la misma banda sonora tendrán interpretaciones distintas de esta, pero así es como yo lo entiendo. Perdonadme si me equivoco demasiado.

La guerra
 
altEl tema de la guerra parece muy claro. Se escucha por primera vez en “Ruined Crop and Going to War”, cuando Joey ha sido comprado por el ejército británico y se separa de Albert. La mayor parte de las veces es una trompeta solista la que lo interpreta, dotándolo de la profundidad dramática que representa la guerra en sí. En otras ocasiones suena agresivo, como en el fragmento de “No Man’s Land” en el que este tema se inserta entre vibrantes percusiones para acompañar la galopada de Joey entre las trincheras. El problema en este caso, como ya veremos, es que la trompeta con el tema de la guerra suena en el corte del CD pero no aparece en la película. Y uno de los momentos claves es justo al final de la historia, asociado a la imagen del caballo y al concepto de “caballo de batalla”. Por este motivo, el de la guerra es uno de los motivos que podríamos considerar tema principal, pues representa tanto al propio animal como a su historia bélica.

El vínculo emocional de Joey y Albert
 
altUno de los temas más destacados de la partitura –también admisible como tema principal y el que más se destaca en el trailer de la película junto con el tema de la amistad- enfatiza la relación que se establece entre el muchacho y el caballo. Se trata de un tema solemne, con frecuencia interpretado por las trompas, y que suena en instantes cargados de emotividad, subrayando el fuerte vínculo entre Joey y Albert. La primera vez que lo escuchamos, en “Bringing Joey Home and Bonding”, es cuando Joey come la avena que le ofrece el chico. Ese término del título –bonding– podría traducirse algo así como “vinculación emocional”, lo que nos dice claramente lo que simboliza este leitmotiv. Es un tema que, en cierto modo, también representa el sentido del honor del propio caballo. Por ejemplo, se escucha cuando vemos que el arado del que tira en “Plowing” comienza a levantar la tierra húmeda por la lluvia. 

Hay dos momentos importantes en que los suena en la película pero que no recoge el CD. Uno es cuando Albert le coloca por primera vez la collera antes de llevarlo a arar el campo. El otro es cuando unos jóvenes soldados alemanes hacen exactamente lo mismo, evitando así que Joey tenga que ir al campo de batalla. Más adelante, lo escuchamos también en momentos climáticos del final de la película en “The Reunion” y “Remembering Emilie and Finale”.

La amistad de Joey y Albert

altSin embargo, hay otro tema, también muy destacado, que representa la relación de Joey y Albert. No lo hace de una forma tan majestuosa o solemne como el anterior, pero sí que realza lo que podríamos llamar su “amistad”. Es un tema que suena con estilo americano y que encontramos ya en el primer corte de la banda sonora, “Dartmoor, 1912”. Lo oímos siempre en el marco rural de la campiña inglesa donde viven. En ese primer track suena asociado a la imagen de Albert corriendo y acercándose a Joey con una manzana. En el primer bloque de la película, que transcurre antes de la guerra, lo encontramos unas cuantas veces más, por ejemplo en “Bringing Joey Home And Bonding”, cuando Albert dice a su madre que él se hará cargo del caballo, en “Seeding and Horse Vs. Car” cuando el chico cabalga sobre Joey, o con tono triunfal en “Plowing”, la escena en que labran el campo bajo la lluvia. También es de los que podríamos considerar tema principal, pero lo cierto es que su uso se diluye antes de la primera mitad de la película para reaparecer solo en los créditos finales.

El tema juguetón de Joey

“Dartmoor, 1912” recoge también este leitmotiv desenfadado que llamo tema juguetón de Joey –lo siento, no se me ocurre nada mejor- y que acompaña algunas escenas desde cuando es un pequeño potro que sigue los pasos de su madre. La flauta, en ocasiones otros vientos de madera, es el instrumento que suele ejecutar este motivo alegre y dinámico, que se combina con intrincados juegos de cuerdas y que volvemos a encontrar en “Learning the Call” y “Seeding and Horse Vs. Car”. Con la llegada de la guerra, este tema deja de utilizarse y, tal como sucede con el tema de la amistad, no lo volvemos a encontrar hasta la suite creada para los títulos de créditos “The Homecoming”.

El reencuentro

Es un tema que aparece al final de “The Reunion”, cuando Albert y Joey ya se han reencontrado. Es también la melodía del solo de piano que escuchamos en “Remembering Emilie and Finale”, cuando vuelven a casa. Su importancia en el conjunto de la partitura queda reflejada por el hecho de ser, junto con los anteriores, uno de los temas que desarrolla la suite final “The Homecoming”.

La campiña inglesa

Es de lo primero que oímos en la banda sonora de War Horse. “Dartmoor, 1912” comienza con un solo de flauta que da paso al poco tiempo a este tema de cuerdas, mientras vemos imágenes aéreas de la comarca de Devon, donde transcurre la primera parte de la historia. Para mi gusto es un gran tema al que no se le saca suficiente partido, pues únicamente reaparece en “Seeding and Horse Vs. Car” y en “The Homecoming”.

Otros temas
Quedan algunos motivos menores más. Uno es el que podemos llamar tema de la subasta. Tiene un tono desenfadado, emparentado con el que hemos llamado tema juguetón de Joey, con predominio de la flauta y otras maderas, pero no es lo mismo. Lo encontramos en la primera mitad de “The Auction” y corresponde a la escena de la subasta de Joey. Vuelve a escucharse en “Learning th Call” y tiene un desarrollo bastante amplio en “The Homecoming”.
 

Existe otro motivo que se utiliza un par de veces. La primera vez es con flauta solista –luego hay un desarrollo de la melodía con oboe y clarinete- en “Bringing Joey Home and Bonding”, cuando Albert trata de establecer lazos con Joey, antes de conseguir que el caballo coma la avena. Curiosamente, el arpa desgrana la misma melodía al principio de “The Reunion”, poco antes de que el animal y el muchacho vuelvan a juntarse. Es esa interpretación con arpa la que se escucha al inicio del trailer. En ambos casos, el tema del vínculo emocional suena después, por lo que este tema del que estoy hablando podría utilizarse para anticipar ese otro leitmotiv más importante.
 

altTenemos otro tema de carácter más o menos cómico, asociado al cabreo de la esposa de Ted Narracott, Rose (Emily Watson). Tiene su desarrollo en “Bringing Joey Home and Bonding” y lo escuchamos cuando el padre de Albert llega a su granja con Joey recién comprado. El rostro de la esposa ya da idea del enfrentamiento que va a tener lugar por no haber adquirido un animal más adecuado para tirar de un arado, pero el desenfado de la música de Williams quita hierro a la confrontación y ayuda a convertirla en una escena de carácter más divertido.
 

Y ya puestos en temas cómicos, no hay que olvidar el de la oca, con maderas y pizzicatos, que podemos oír al final de “Bringing Joey Home and Bonding”.
 

Finalmente, se puede mencionar un motivo de cuatro acordes que suena muy dramático en algún que otro momento, por ejemplo cuando Joey y otros muchos caballos están tirando de las piezas de la artillería alemana subiendo una pendiente.
 

Hay más, seguro. Probablemente asociados a otros personajes y lugares, aunque su paso por la película es más fugaz y pueden aparecer únicamente en un solo corte del CD. Por eso creo más conveniente iniciar el próximo apartado describiendo uno a uno los cortes de la edición discográfica.

Track a track
Ya he dicho que no hay un tema principal evidente, sino varios. Además, su uso está muy asociado al desarrollo de la trama. En consecuencia, tanto en el caso de la película como de la banda sonora podemos hablar de tres bloques bien diferenciados, una división que puede hacer pensar que no es un score absolutamente coherente y compacto. Y así es en cierto modo, de no ser porque el bloque final con los tres últimos tracks cierran el círculo de forma completa. El primero de esos bloques incluye toda la parte que transcurre en la campiña inglesa, desde el nacimiento de Joey hasta el comienzo de la guerra. La mayoría de los leitmotivs de War Horse se presentan en esas escenas y el tono bucólico, cuando no alegre, es el predominante.

El segundo bloque corresponde a la guerra. La música es más dramática y tensa, con algunos cortes de acción de lo más espectacular, como “The Charge and Capture” y, especialmente, la trepidante segunda parte de “No Man’s Land”.

El reencuentro y retorno configuran el tercer bloque, con los tres cortes finales, aunque como ya se ha dicho “The Homecoming” corresponde a los títulos de crédito.

1. Dartmoor, 1912 (03:35)
altLo primero que escuchamos es un solo de flauta mientras vemos imágenes aéreas de la campiña inglesa. Un crescendo de cuerdas da inicio al bello tema de la campiña (0:14). Tras el título en pantalla, asistimos al nacimiento de Joey, subrayado de forma suave con las maderas. Las imágenes del potro, un poco más crecido, y su madre se acompañan de intensos y rápidos juegos de cuerdas que dan paso al tema juguetón de Joey con flauta (1:35). Cuando vemos a Albert subir una cuesta para ir a ver al caballo y darle una manzana suena de manera espectacular el tema de la amistad del muchacho y el animal (2:09), un leitmotiv de sonoridad muy americana que volvemos a escuchar brevemente, pero majestuoso, al final del corte, después de otro fragmento del tema juguetón.

2. The Auction (03:34)
En este corte tenemos el orden invertido. Toda la primera parte incluye lo que he llamado tema de la subasta y corresponde, efectivamente, a la escena de la subasta en la que Ted puja –algo inconscientemente- por Joey para que no se lo quede el cacique de las tierras, Lyons (David Thewlis). La segunda mitad de la pista, a partir de 1:55, corresponde a la escena anterior, cuando llevan a Joey al pueblo para ser vendido. Suena más dramática, también con algún solo de flauta y alguna referencia al tema de la campiña.

3. Bringing Joey Home and Bonding (04:42)
altLas cuerdas juegan entre sí otorgando un tono ciertamente cómico a buena parte de este track. Ted Narracott se enfrenta a su mujer después de haber comprado el caballo. La música anticipa la bronca que le va a caer. Sin embargo, Albert está contento de que su padre haya comprado precisamente ese caballo y se presta a adiestrarlo. De ahí que la flauta interprete el tema de su amistad (1:20) . Ambos leitmotivs, el cómico de la mujer y el de la amistad, se van alternando hasta que encontramos un motivo iniciado con flauta, lento y emotivo (2:16), que precede al tema del vínculo emocional que parece nacer entre Albert y Joey cuando el caballo acepta comer la avena que le ofrece (3:18). Al final, tenemos el tema cómico de la oca, con oboe y pizzicatos (3:50), que se emplea en algún otro instante de la película, aunque no se incluye más en el CD.

4. Learning the Call (03:20)
Albert enseña a Joey a acudir con él cuando silba. Un inicio majestuoso con cuerdas coge algo de ritmo para derivar en el tema del vínculo emocional (0:30) cuando el chico lo consigue por primera vez. La versión de la edición discográfica utiliza más adelante tanto el tema de la subasta –aunque no se usa en la película- como el tema juguetón (2:05), que repite varias veces, jugando con flauta, cuerdas y metales, hasta el final.

5. Seeding and Horse Vs. Car (03:33)
altEste es otro corte que no se utiliza en el film tal cual suena en el CD. Para empezar, la mayor parte debería ir cronológicamente después de “Plowing”. Por otro lado, está formado por varios fragmentos musicales que se utilizan en distintas escenas. Lo que empezamos escuchando son cuerdas y una flauta que dará paso al tema de la campiña (0:31). Es para el momento en que Albert entra en el establo para preparar a Joey y llevarlo a labrar el campo. Cuando va a intentar ponerle la collera, hay un bonito fragmento de oboe y clarinete (1:00) acompañado por las cuerdas, que en la película enlaza con el tema del vínculo, pero este no se incluye en el CD. En el disco, sigue un fragmento que se emplea en la cinta en una escena posterior, cuando el padre siembra el campo ya arado y vemos a Albert montado en Joey. Su tema de amistad suena magnífico cuando los vemos cabalgando por los campos (2:25). Tras varias presentaciones del tema juguetón, cuando jinete y caballo se pican con el automóvil que conduce el hijo de Lyons, Williams construye un tema cada vez más acelerado y trepidante, con final abrupto: Joey no quiere saltar obstáculos.
 

6. Plowing (05:10)
Es uno de los varios temazos de War Horse, que hay unos cuantos. Comienza con el tema juguetón, pero en esta ocasión no tiene nada de divertido, sino que suena mucho más dramático con cuerdas y maderas graves. El vecindario acude a ver cómo Albert y Joey fracasan a la hora de labrar el campo. El tema suena dramático en toda la primera parte del corte. Sin embargo, un poco más adelante, un crescendo de cuerdas conduce la música hacia una vertiente más heroica (1:29). Sigue el tema juguetón -la madre de Albert abronca a Lyons-, combinándose con el de la amistad en plan más emotivo y optimista. La lluvia obliga a la gente a irse y ellos quedan solos en el terreno. En 3:33 las trompas interpretan de forma majestuosa el tema del vínculo de Albert y Joey: la lluvia ha embarrado el campo y eso facilita que el caballo puede tirar más fácilmente del arado.
 

Este tema se fusiona con el tema de la amistad (3:55), que escuchamos con aire triunfalista. Una melodía de flauta, punteada con notas de arpa finaliza el corte de forma calmada.

7. Ruined Crop and Going to War (03:29)
altLas maderas dan un comienzo triste a este corte, debido a que una tormenta ha arruinado la cosecha. Un ostinato de tres notas descendentes que va variando en intensidad aparece cuando en el pueblo se anuncia que Inglaterra ha entrado en guerra con Alemania (1:12). En la película queda el tema interrumpido en ese punto, mientras que en la edición discográfica oímos de nuevo un tema melancólico de cuerdas y maderas (1:52) que enlaza con el tema del vínculo emocional de Albert y Joey (2:15). Lo escuchamos cuando el chico coloca al caballo, que ha sido adquirido por el ejército británico, la cinta de la medalla que ganó su padre en la guerra años atrás. Justo despúes aparece por primera vez el tema de la guerra, una frase de trompeta a la que los redobles de tambor proporcionan una dimensión dramática y oscura (2:30). Joey es conducido al cuartel desde el que partirá a la guerra, donde se encontrará por primera vez con otro magnífico ejemplar equino llamado Topthorn.

8. The Charge and Capture (03:21)
altEs el primer tema de acción dramática de la banda sonora. Joey es el caballo del capitán Nicholls (Tom Hiddleston) y la escena corresponde a la carga de la caballería británica sobre un campamento alemán. Una trompeta hace la llamada al inicio del track. La percusión y la sección de cuerda, que suena como un zumbido de insectos, cobra cada vez más ritmo e intensidad. Notas graves de los metales se unen durante el ataque, las trompetas hacen sonar fanfarrias más agudas.
 

En la película toda esta parte es más larga, mientras que en el CD la música que acompaña a la carga se interrumpe con acordes lastimeros de las cuerdas que dan paso a la trompeta interpretando el tema de la guerra con tintes de tragedia (1:40). Con una magnífica elipsis, Spielberg y Williams nos dan la noticia de que uno de los personajes ha caído. Las trompas inician después una melodía de tono fúnebre cada vez más intenso: el mayor Stewart (Benedict Cumberbatch) se rinde a los alemanes (2:11)

9. The Desertion (02:33)
altJoey está ahora en el bando alemán. Dos jóvenes hermanos, Michael y Gunther, van a desertar. El corte comienza con cuerdas dramáticas y elegíacas, y después se anima con un tema de acción cuando los dos soldados escapan (0:29). Michael llega galopando hasta la columna alemana y monta en el caballo a su hermano Gunther. Juegos de cuerdas y metales crecen en intensidad, apoyados por golpes de percusión. La música se calma más tarde, con maderas y cuerdas sonando dramáticas y misteriosas (1:30). Acaba convirtiéndose en un adagio fúnebre cuando los hermanos son hallados y ejecutados.

10. Joey’s New Friends (03:30)
altLas maderas entran con tono bucólico y algo melancólico. Una niña francesa, Emilie (Celine Buckens), que vive con su abuelo (Niels Arestrup), ha encontrado a Joey y Topthorn dejados por Michael y Gunther en el molino de viento de la granja. El aire triste cambia más adelante con una entrada de metales y adquiere un carácter más agradable (0:55) y progresivamente más divertido, cuando la niña decide que montará a alguno de los caballos. La música de este corte contrasta con el aire dramático o de acción que predomina en todo este bloque de la guerra. Se vuelve más dinámica y alegre con flautas y otras maderas; muy pastoral, podría decirse, cuando Emilie quiere enseñar a Joey a saltar (1:45), en escenas que contienen algún momento simpático realzado con el clarinete en el tramo final de este corte.
 

11. Pulling The Cannon (04:11)
Sin embargo, lo bueno se acaba y los alemanes encuentran y se llevan a los caballos ante la desesperación de Emilie. Los animales son utilizados para tirar de pesadas piezas de artillería hasta que no aguanten más. Eligen a Topthorn para tirar de un gran cañón ladera arriba, pero Joey, como impulsado por un sentido del honor poco animal, es quien parece prestarse voluntario a hacerlo. Ostinatos graves de cuerdas acompañan esa escena dotándola de intensidad dramática. Llega el tema de la guerra (1:03) y después las cuerdas y los metales subrayan el esfuerzo de los caballos subiendo la pendiente, resaltando el dramatismo con cuatro acordes que parecen poner de manifiesto la miseria que representa la guerra (1:46). Algo más tarde, las cuerdas interpretan un emotivo adagio. Los cañones, ya en lo algo de la colina, comienzan a disparar contra las trincheras de los aliados (2:57). Las imágenes muestran primeros planos los rostros asustados de los soldados que están allí refugiados, entre ellos el de Albert (3:23).
 

12. The Death Of Topthorn (02:45)
La gran habilidad compositiva de Williams para emocionar la comprobamos en este bello adagio de cuerdas que se utiliza para la escena de la muerte de Topthorn, herido y abandonado por el ejército aleman. Se tiende en el suelo, a pesar de los intentos de su cuidador para que se mantenga en pie. Joey se acerca a su compañero y escuchamos una triste melodía de flauta, con la música expresando sus sentimientos. La escena acaba con la huida de los alemanes ante la llegada de los aliados. Cuando Joey es liberado y su cuidador le grita que corra, la música crece, otorgando a la escena un rayo de esperanza, aunque Joey parece no querer abandonar el cuerpo de Topthorn. Un gran tema.
 

13. No Man’s Land (04:35)
altSi el corte anterior es una demostración del magistral saber hacer de Williams, la segunda parte de este “No Man’s Land” es también soberbia. Se trata de otro track desordenado. Toda la primera parte disonante corresponde a la escena en que Joey ha quedado atrapado en una alambrada en “tierra de nadie”, mientras un inglés y un alemán colaboran para liberarlo. Lo mejor de este corte, a partir de 1:51, acompaña la escena anterior en la que Joey corre desbocado huyendo de las bombas y saltando trincheras. Es la escena de galope intenso que no puede faltar en cualquier película equina que se precie. Cuerdas, metales y percusión crean un tema trepidante, acelerado, vibrante, frenético, espectacular… Solamente un inciso. En la edición discográfica escuchamos el tema de la guerra con carácter heroico insertado en la galopada, pero no se escucha en la película. Una lástima.
 

14. The Reunion (03:55)
Entramos en el bloque de desenlace. Un arpa interpreta una melodía que habíamos escuchado antes con flauta en “Bringing Joey Home and Bonding”. Precedía al tema del vínculo entre Albert y Joey y en esta ocasión va a suceder de forma parecida. Albert está temporalmente cegado por gas y alguien le comenta que tienen allí un caballo que ha sobrevivido milagrosamente en tierra de nadie. A pocos metros, un médico del ejército británico decide que Joey debe ser sacrificado porque tiene tétanos. Pero cuando están a punto de darle el tiro de gracia, el caballo escucha el silbido con que lo llamaba Albert cuando lo adiestró en Devon. Las cuerdas arrancan de forma emotiva el tema del vínculo entre el chico y el caballo (0:35). Algo más tarde, ese mismo leitmotiv suena más solemne con la entrada de las trompas, cuando el médico se convence de que Joey es el caballo de Albert (2:17) al lavar su frente y ver el rombo blanco que tiene en ella. Después escuchamos por primera vez un bello motivo de cuerdas (3:04), el que podemos llamar tema del reencuentro, una melodía sosegada y cargada de esperanza. El médico dice a Albert que cuidarán de Joey y, poco después, se anuncia el fin de la guerra.

15. Remembering Emilie and Finale (05:07)
altEl corte final de la película en sí comienza con el tema del vínculo con maderas sobre cuerdas. El abuelo de Emilie ha comprado a Joey en una subasta, en recuerdo de su nieta ya fallecida, pero el caballo prefiere ir con Albert. Al final, el anciano se lo devuelve. La flauta suena en tono bucólico (1:19) y después las cuerdas realzan la sensibilidad del momento. Cuando vemos un atardecer de cielo anaranjado y la silueta de Albert y Joey volviendo a casa, Williams utiliza el tema del reencuentro con un evocador solo de piano (2:08).
 

El compositor carga de sentimentalismo –bien entendido- el encuentro del chico con su madre, de nuevo con las cuerdas interpretando el leitmotiv del reencuentro (3:11). Más adelante, el tema del vínculo acompaña el abrazo del muchacho con su padre (3:46). Y finalmente suena la trompeta de la guerra (4:25) con las últimas imágenes de Joey, el caballo de guerra, el auténtico protagonista.
 

16. The Homecoming (08:06)
Finalizada la película, este extenso corte es una suite para los títulos de crédito que recoge los principales temas, exceptuando el de la guerra. Comienza con el tema juguetón de Joey, sigue con el tema de la subasta, también desenfadado (0:19), alternando cuerdas y maderas. Las cuerdas continúan con este motivo, dándole un toque celta, y luego la música crece en intensidad con el mismo tema. En 2:21 comienza un solo de flauta y arranca el tema campestre de Devon (2:45). En 3:35 tenemos el tema de la amistad de Albert y Joey con flauta y, después, el tema juguetón de Joey (3:59), que va cobrando cada vez más ritmo, para enlazar de nuevo con el tema de la amistad de Joey y Albert con las cuerdas. En 4:45 coge un ritmo dinámico y alegre, y más adelante se inicia el tema del vínculo de Joey y Albert (5:28) con las trompas en plan solemne primero y después con las cuerdas. Luego encontramos el tema del reencuentro (6:18) y, por último, un solo de flauta acaba la banda sonora del mismo modo que la empezaba en «Dartmoor, 1912» (7:17). Un regreso al origen, un círculo cerrado, una BSO de ida y vuelta.