Treasure Planet

Compositor : Howard, James Newton
Año : 2002
Distribuidora : Disney

Una gran sorpresa me ha supuesto reencontrarme con el cine Disney que a mí me gusta, aquél aventurero, fantástico y soñador, donde alguien tiene algo que demostrar, pero todo, absolutamente todo se pone en su contra, un antihéroe con un gran talento que espera salir en el mejor momento.

El Planeta del Tesoro, por extraño que parezca, no bebe de películas precedentes de la factoría, aunque sí que toma elementos básicos que por más que pasen los años, nunca desaparecerán. El Planeta del Tesoro, a diferencia de los que muchos esperaban, se distancia más de Atlantis para parecerse más a otra producción totalmente fallida en cuanto a resultados (debido a su irregular metraje) de la Fox, "Titán". Si bien El Planeta del Tesoro es más uniforme, y para nada decae en ningún momento, convirtiéndose primero, en un gran divertimento, y segundo en una genial adaptación de la obra literaria.

Muchos pensarán que es una obra menor de la compañía, pero después de ver esta cinta, creo que a más de uno podrá quitársele de la cabeza tal pensamiento.

Una vez más tenemos la suerte, la inconmensurable suerte, de tener en las labores musicales a un gran compositor (lejos quedaron los machacones años de Menken), James Newton Howard, el cual atraviesa uno de los momentos creativos más dulces del panorama actual, capaz de hacer frente a cualquier proyecto que se precie. Antecedentes Musicales Está claro que los principales antecedentes son dos, Dinosaurio y Atlantis. La primera obra fue una clara composición puntera dentro de la carrera del autor, mientras que la segunda, sorprendía a propios y extraños, convirtiendose tal vez en lo mejor de toda la película (junto a su animación y diseños).

Así, El Planeta del Tesoro toma como mayor influencia la segunda mitad de Atlantis y no su primera, que estaba más próxima a Menken. Por lo tanto, el tema principal, una fanfarria para nuestro protagonista, Jim, roza un aire ciertamente heroico y señorial, y por qué no, también juvenil, con la incorporación de una guitarra eléctrica que nos recuerda enormemente a La Tormenta Perfecta de Horner, y con unos aires celtas magníficamente conseguidos por una flauta. Una delicia, la verdad.

En esta ocasión, la banda sonora de El Planeta del tesoro se presenta más compacta y uniforme que la de Atlantis, un tanto irregular por ese claro punto de inflexión en su mitad.

El Score

La partitura empieza no precisamente en el comienzo de la película, con ese magnífico prólogo de Jim de niño, viendo un holo-libro. Aquí la música de Howard estaba bastante bien conseguida, con continuos guiños a la música de acción típica de piratas.

La edición discográfica no recoge el comienzo de este tema, con ese gran aire nostálgico celta, ni el resto que tiene lugar en esta literaria batalla.

La edición empieza 12 años después, con un Jim joven, jugando al monopatín espacial, una escena que alardea de una animación digna de los mejores momentos de la Disney.

El segundo corte nos traslada al restaurante de la madre de Jim, así como el tercero y el cuarto. "To the Spaceport", "Rooftop" y "Billy Bones" suponen el cambio de rumbo en la vida de un muchacho que se siente frustrado, capaz de demostrar lo que es, pero sin oportunidades para hacerlo. Aquí encontrará la suya.

The Map nos describe cómo Jim es capaz de encontrar el mecanismo para determinar cuál es la ruta que les dirigirá hacia el planeta del tesoro. Un alarde de animación.

Y por fin tenemos un nuevo tema, para una persona que, por supuesto, será importantísima para la trama. Aquí Howard se saca un gran tema, también de aires celtas. ¡¡Qué menos para un gran pirata!! Un personaje legendario que aquí tiene un diseño excepcional. No se trata de otro mas que de John Silver. Y el tema, "Silver". También nos presentan a un bichito que se supone insoportable, Morpho, capaz de hacernos desesperar como en los peores tiempos de Jar Jar. Pero sorprendentemente, este personaje es mucho más ameno y tiene sus momentos.

The Launch retoma una obra cumbre en la carrera del compositor, Wyatt Earp, y la junta con ciertos toques de Waterworld, ésta última, con tal influencia a lo largo del tiempo que es hasta cansino el recordarla. El lanzamiento del barco tiene lugar y, por supuesto, Howard lo aprovecha como mejor sabe hacer, con uno de los mejores temas. Aquí el tema principal recuerda enormemente a "Héroes fuera de Órbita" de David Newman, salvo por esos toques celtas. A retener. El final del tema, con un magnífico acordeón, hace alusión a Silver.

"Silver Confronts Jim" es un tema con una segunda mitad preciosa. Aquí se empieza a entablar una amistad que después derivará en algo más, el sentimiento paternal que Jim no tiene a causa de perder a su padre cuando era niño. Esta relación tal vez sea lo más conseguido de toda la cinta, y no todo lo que de más pueda suponer alguien que no haya visto la película, es decir, animación y poco más. Una gran equivocación.

"Jim Chases Morph" supone una gran decepción para Jim. De ahí que la música tenga continuos giros. Primero uno de jovialidad y de acción, propia del juego del pillo-pillo que Jim tiene con Morph, y posteriormente de suspense... Hasta la tragedia y la alegría por divisar el planeta del tesoro.

"Ben" es el tema del robot loco que es primo lejano de C-3PO. Este robot, al principio, produce la misma sensación que Morpho, es decir, "va a ser inaguantable". Pero increíblemente, también lo llevan bien, y hasta se hace aguantable. Howard utiliza una instrumentación parecida a las ondas Martenot para determinar la presencia del robot (al igual que la flauta o el acordeón representan a Jim o a Silver respectivamente), aunque no me atrevería a decir que son éstas, pues su utilización es muy reducida y espaciada.

"Silver Bargains" supone una negociación por parte de Jim y Silver por el mapa del tesoro, algo que ninguno de los dos tiene, pero que Silver, desgraciadamente, no sabe, y piensa lo contrario. Howard empieza con el tema de Silver para posteriormente oscurecer la música. ¿Motivos? Mejor veis la película, ya que desde ahora, sólo daré pinceladas. ¡¡No quiero quemaros el final!!

Saltamos a un tema, "Backdoor", que se corresponde con una de las mejores escenas en cuanto a animacion, un avance que es muy empleado. Howard utiliza una música de acción directamente sacada de Waterwold, con esa dureza en la percusión.

"The Portal" se aproxima más a esa música cuasi-religiosa de Howard para Atlantis, gracias a la aportación de los coros. Aquí la música se ciñe demasiado a la acción, de ahí las continuas subidas y bajadas, momentos más tranquilos con otros más animados.

Un gran tema, para una gran escena. Por fin Jim puede demostrar de qué madera está hecho. La oportunidad de su vida y, por supuesto, aquí no puede caer. Howard describe la acción con música de continua tensión, con una remarcada percusión, que de nuevo nos remite a Waterworld. Los violines ponen la nota definitoria para aproximar todo al tema de Jim, que poco a poco crece gracias a una guitarra que se hace más presentes y a unos coros que magnifican la acción. "Jim Saves The Crew" termina su colosal nivel con el tema más solemne, para terminar en una aportación musical de los simpáticos personajes Morpho y Ben.

El tema que cierra el score es el de la despedida, "Silver Leaves". Sinceramente, aquí se me hizo un nudo la garganta. Odio esto, y más si dentro de poco van a dar la luz y todo el mundo te va a ver. En fin, qué se le va a hacer. Howard contribuye a todo eso en gran medida, con una música evocadora, delicada, de nuevo con toques celtas, el tema de Silver se toca lentamente, con una gran belleza. Después estalla y por supuesto, las lagrimas hacen acto de aparición. De esta escena pasamos a una fiesta celta que tiene lugar algún que otro momento después. Aquí el ritmo celta reina, sin ningún tipo de concesión. Me alegro de ello. Parece que los Chieftains estuvieran por ahí escondidos a modo de dibujo animado.

El final... Magnífico.

Las Canciones

Dos canciones se integran en el CD. Una de ellas perfectamente integrada en el contexto, con una especie de videoclip que describe el pasado de Jim, con la pérdida de su padre en el ¿mar? Bueno, sí, el mar galáctico, y el paralelismo de esta relación con la que está entablando con John Silver. Una escena magnífica que supondrá una explicación perfecta a los personajes y a lo que los motiva, aunque por fuera expresen otros pesares.

Para esta canción, se ha elegido a John Rzeznik, el vocalista del grupo americano Goo Goo Dolls, un grupo que considero de los más personales y talentosos del panorama musical. Sus baladas son auténtico caviar que ha ido desperdigándose por diferentes bandas sonoras, entre ellas "Ciudad de Ángeles" y "Twister". John utiliza su voz quebrada para afianzar más las emociones dentro de las imágenes.

Aquí en España la elección ha sido perfecta, ya que Alex Ubago se ha adaptado a la canción compuesta por John, y no sólo eso, sino que también ha adoptado distintas tonalidades de la voz de este cantante americano. Una gran adaptación que prima el producto más que el protagonismo personal.

La segunda canción, "Always Know where You are", a manos de BBMak, entra dentro de la línea temática de los Goo Goo Dolls, y podría pertenecer fácilmente a su discografía. Una canción destinada a los títulos de crédito que no tiene mayor importancia salvo la de acompañar como se ha hecho mil veces al reparto artístico y técnico.

He aquí, en las canciones, donde también puede verse la influencia de Titán, ya que estas dos toman como mayor influencia el Over my Head de Lit, la canción de cabecera de la fallida película de animación de la Fox.

Conclusiones

Si analizamos la obra de este compositor, con unos orígenes fomentados en el sintetizador, pero eso sí, sin perder un ápice de talento (así, la partitura de Off Limits, que aquí se llamo Saigón, por poner un ejemplo, cuadra perfectamente con la asfixia que a medias consiguen las imágenes), y observamos como todos estos años han servido para un mejor asentamiento de conceptos, con obras capitales como Waterworld, Viven, Gran cañón, Dinosaurio, El protegido... Ahora nos encontramos con un nivel de composición difícilmente superable, con una capacidad de eclecticismo propio de los grandes, y con una relectura de cada nota compuesta para películas, entretenidas, correctas, pero poco más, donde los sentimientos se ganan a golpe de batuta, y donde las pautas generacionales evidencian una nuevo relevo, para aquellos compositores amargamente olvidados (Poledouris, Holdridge, Broughton...), otros a falta de talento, pero con excesivo oficio, sobrevalorando cada nota que hacen (Williams y Goldsmith), y algunos que no aportan nada nuevo salvo más de lo mismo (Horner). Así, nos encontramos un nuevo olimpo musical, ni mejor ni peor, sino debido a unos tiempos muy diferentes, donde Zimmer y sus Mediaventures saturan el oído de cualquiera que se precie, esperando que los verdaderos talentos de Klaus Baldelt, John Powell, o el siempre talentoso y criticado Hans Zimmer, den un poco de luz a un universo demasiado "percusivo" y machacón, donde nada nuevo se huele. Donde Elfman intenta retomar un vuelo demasiado oscuro que le hacía olvidar su verdadero punto fuerte, la melodía, y donde genios indiscutibles que a golpe de carrera esperan a dar su do de pecho, caso de Howard Shore, Alan Silvestri y, por supuesto, James Newton Howard, afianzándose así a un lugar totalmente merecido.

El futuro de la música de cine limitado a un lugar y a un dominio, el que extrañamente parece marcar las pautas, eso sí, sin olvidarnos de genios al otro lado del charco, y extrañamente procedentes de nuestra piel de toro, alguien llamado Ángel Illaramendi. Después de esto, ¿alguien piensa que el futuro es poco prometedor? Pues dejadme con este futuro, porque seguro que encontraré ese Planeta del Tesoro, un planeta con música de James Newton Howard.

Lo Mejor: Es Atlantis perfeccionado.

Lo Peor: Suena mucho a obras precedentes, pero grandes obras, al fin y al cabo.

El Momento: Silver Leaves, momento Kleenex.

DDBSpawn