Dentro de este contexto, Frank Herbert inicia su labor. Es un hombre inquieto... periodista, director de un periódico, fotógrafo, naturalista e investigador... En 1971 inició un experimento de "demostración ecológica" en una granja autosuficiente.

En 1962 termina Dune, el inicio de la primera trilogía.

Es difícil explicar la obra en pocas palabras. Voy a intentarlo enumerando algunas de sus líneas maestras:

1. Un universo habitado, interconectado por grandes naves monopolizadas por una corporación que depende de la droga Melange, la cual sólo existe en Arrakis y concede longevidad al hombre, así como un nivel de conciencia más elevado a ciertos individuos escogidos.
2. Sociedad casi feudal. Un imperio regido por castas y familias nobles. Existencia de sociedades semi-secretas que operan paralelamente al poder establecido, con sus propios fines, así como corporaciones comerciales.
3. Ambiente tecnológico con características propias. Una mitología y religión de la tecnología, con sus propias prescripciones y tabúes. Biotecnología (aunque este aspecto se trabaja más en el tercer libro y florece en los siguientes).
4. Arrakis, un planeta pobre y desértico, con una ecología especial y origen de la Melange (también llamada especia).
5. Múltiples intereses económicos, sociales y religiosos que impulsan la historia.

De 1969 data El Mesías de Dune.

Es el volumen más corto de toda la serie, casi un tercio del primero, y aún así es quizá el más difícil de valorar (típico problema del "volumen central" de toda trilogía). Es un ejercicio sobre el efecto del poder absoluto en un hombre, la influencia en las masas de una figura mesiánica, y en una mareante extrapolación (de nivel individual a colectivo, y de nuevo a individual), una visión de cómo lo que podemos entrever de nuestros posibles destinos dejan fijas esas opciones y lo difícil que es cambiarlas, tanto a nivel personal como de todo un universo...

Este libro en su primera lectura me pareció tan sólo de transición hacia el siguiente título y no demasiado interesante (al menos al compararlo con el monumental primer volumen). Fue en la siguiente lectura, ya terminada la lectura de todos los volúmenes restantes, cuando aprecié el trabajo tan detallado e inteligente de Frank Herbert, preparando sin desvelar el material para la continuación. Quizá este volumen tendría que haber sido un anexo del primero o mejor un prefacio al tercero, y habría ayudado a su comprensión.

Por fin, en 1976 concluye la primera trilogía con Hijos de Dune.

En ella tenemos a los sucesores del "Mesías" del anterior volumen luchando por liberar el universo de la visión fijada por su predecesor, desde una posición desfavorable y en medio de tremendas tensiones socio-políticas, inhibiciones culturales y religiosas, intrigas y un complejo juego de lealtades. Simultáneamente, han de encontrar su propia identidad...

Esto es lo que podría plantearse como las líneas maestras de la trilogía. Hay que conocer también que estos libros fueron concebidos al mismo tiempo (el propio autor escribe que sobre 1960 tenía fragmentos escritos del segundo y tercer volumen sin haber terminado el primero). Este hecho les confiere gran coherencia interna. La narración es enormemente rica. Para hacernos una idea, lo comparo con la obra de Tolkien en complejidad. Al igual que él, plantea una historia, mitología, filosofía, costumbres, culturas... propias tan sólo del universo de Dune. Otras características muy propias de esta obra podrían ser el profundo retrato psicológico de los personajes, con su historia y motivaciones, o la fluidez en los acontecimientos, sin extensos pasajes descriptivos innecesarios, por citar algunas...

Los principios de Dune fueron difíciles... más de doce editores rechazaron la obra, no hubo publicidad, la crítica fue muy severa... pero despacio, a través del boca a boca, en círculos estudiantiles fundamentalmente (en los que se convirtió en un libro de culto, como le ocurrió a la obra de Tolkien), el conocimiento (y la demanda) de Dune se fue extendiendo hasta hoy... En 1965 era difícil encontrar Dune en los estantes de las librerías.

Cito al autor:

"Durante dos años, me vi inundado por quejas de lectores y libreros que no podían conseguir el libro. El Catálogo Universal lo alababa. No dejaba de recibir llamadas telefónicas de gente preguntándome si estaba iniciando un culto.

La respuesta: ¡Dios, no!"

Frank Herbert fue su creador, autor de varios libros que enriquecieron este maravilloso universo. ¿Pero qué es lo que hizo especial a este libro? La creación de unos personajes, escenarios y conceptos únicos en el género fantástico:

• Bene Gesserit: En Dune se describe cómo el hombre ha decidido destruir todo vestigio de máquina (la Jihad). De ahí que haya una serie de "escuelas", por decirlo de algún modo, que buscaban adiestrar en el control mental a los niños desde su más tierna infancia. Estas enseñanzas fueron limitadas solamente a las mujeres, y son éstas las llamadas Bene Gesserit.
• Caballero de Arena: Son aquellos Fremen que son capaces de capturar a un Gusano y domarlo, subiéndose a su lomo, pudiendo así dirigirlo bajo el libre albedrío del jinete.
• Caladan: Es el mundo natal de Paul Atreides, no demasiado diferente a la Tierra, gracias a su vegetación y a su abundancia de agua.
• Casa: En Dune, los planetas están gobernados por Clanes que son llamados "Casas". Estas Casas a su vez están dirigidas globalmente por el Emperador. Así tenemos la Casa Atreides, o la Casa Harkonnen.
• Cofradía: Es la segunda escuela sobre el adiestramiento físico y mental, que tuvo lugar después de la escuela de las Bene Gesserit. Aquí no hay restricciones de sexo, de hecho el poder de la Cofradía es mayor por su monopolio de los viajes interplanetarios así como de cualquier operación bancaria.
• Destiltraje: Es el traje que usan los Fremen para recuperar el agua del cuerpo a través del sudor y la orina. Este agua se recicla y el cuerpo puede volver a utilizarla pudiendo sobrevivir varios días sin deshidratación.
• Especia/Melange: Se puede llamar de las dos formas. La Especia es la sustancia sobre la que gira todo el cosmos y por extensión el universo de Dune. Es el motor, la energía, la sustancia capaz de ver el futuro, de dar alimentos. La Especia lo es todo, y el que la controle, tendrá el poder... de ahí que la Especia deba fluir.
• Fedaykin: Son un grupo de los Fremen, como podrían ser los Kamikazes japoneses, que son capaces de dar su vida con tal de enmendar un error o llegar a conseguir un fin. Son fieros y valerosos.
• Fremen: Son los habitantes del desierto de Dune. Sus costumbres son únicas, dando importancia suprema al agua, y distribuyendo ésta sin pérdida entre toda la tribu. Son guiados por una Reverenda Madre y esperan la llegada del Kwisatz Haderach para guiarlos a suelos más frondosos, y a mundos llenos de agua. Son cultivadores de la Especia, de ahí sus ojos azules producidos por la saturación de la Especia en la sangre. Éstos se denominan "Ojos del Ibad".
• Gran Convención: Fue una tregua que estableció la tríada de poder, a saber: La Cofradía, las Casas y el Imperio, con tal de no utilizar uno contra otro armas atómicas contra objetivos humanos.
• Gusano/Shai Hulud: "El viejo del Desierto" como también se llama. Los gusanos de Dune son los portadores de Especia, de hecho se considera que ellos son la propia Especia. Son capaces de alcanzar los 400 metros de longitud, y se dice que el desierto está producido por ellos. El agua los mata.
• El Jihad Butleriano: es similar a las Cruzadas, donde se estableció una lucha a muerte contra las maquinas prohibiéndose la construcción de cualquier maquina a imagen y semejanza humana.
• Mentat: Son computadores humanos. Habitantes del Imperio que fueron adiestrados para utilizar su máxima capacidad de lógica.
• Pequeño Hacedor: El Pequeño Hacedor es lo que será en un futuro un Gusano de Arrakis. Es mitad animal, mitad planta y vive en las profundidades del desierto. Sus excrementos son la masa de Preespecia, que mezclados con agua produce una singular explosión, ya que la superficie se mezcla con el fondo de Arrakis (como bien sabemos el fondo es agua), produciéndose la perdida total de la Especia en el planeta, algo que utilizó Paul Atreides para chantajear al Emperador. Esta Masa de Preespecia normalmente sube a la superficie y al secarse forma la propia Especia.
• Sardaukar: Son soldados fieros y sin ningún tipo de piedad al servicio del Emperador. Formados en planetas con condiciones de vida infrahumanas se cuenta que eran pocos los que pasaban de los 10 años.
• Agua de la vida: Los Fremen recogen el último aliento de las crías de gusano en forma de agua, el agua que expulsan antes de morir ahogadas en unas fosas de arena que se ven súbitamente invadidas por agua. Ese último aliento forma el agua de la vida, un líquido saturadísimo de Especia que está envenenado para casi todos los mortales. Sólo algunas Bene Gesserit son capaces de cambiar este agua y despoblarla de cualquier sustancia tóxica para el cuerpo humano, convirtiéndose así en una Reverenda Madre. El único hombre capaz de cambiar esta sustancia e ir más allá de cualquier Reverenda Madre es el Kwisatz Haderach, que no es otro que Paul Atreides, conocido entre los Fremen como Muad´Dib. La ingesta del agua de la vida, una vez transformada por la Reverenda Madre, produce sensaciones afrodisíacas.
• Arrakeen: La capital de Arrakis, donde se concentra toda la actividad diplomática con el resto de universo, y punto abierto para que la Especia "fluya".
• Martilleador: Aparato que los Fremen utilizan para llamar a los gusanos, y atraerlos hacia ellos para poder domarlos.
• Muad´Dib: Animal que habita en los desiertos de Arrakis, parecido al ratón, y que se caracteriza por su capacidad para sobrevivir en condiciones extremas y por su gran rapidez. Paul asume ese nombre una vez es aceptado en la tribu Fremen. En el trascurso de su epopeya en Arrakis demostrará que es capaz de hacer justicia a ese nombre.
• Kwisatz Haderach: El Mesías, "El camino más corto". Es capaz de ver el pasado, el presente y el futuro a la vez... y no es otro que Paul Atreides.

Dune

Compositor : Toto
Año : 1983 / 1997
Distribuidora : Polygram / Pendulum

El origen de una adaptación

Como gran obra, susceptible, hasta cierto punto, de una asequible adaptación, Dune tuvo varias intentonas de traslado a la gran pantalla antes de que Lynch recogiera el testigo y pusiese sus manos en el proyecto.

La primera intentona y la más sorprendente (por sus toques de cierta fantasía, producida por su excesiva ambición), fue a cargo del chileno Alejandro Jodorowsky, en 1975. Este ilustrador, cineasta y actor, era un verdadero seguidor del libro de Frank Herbert, y estaba entusiasmado con plasmar este libro en pantalla. Tal era su entusiasmo que contacto enseguida con Dalí (sí, es cierto), para que éste se encargase de los decorados, e inclusive participase como actor representando al Emperador. Como director pensó en Orson Welles, y como actores principales Alain Delon (que haría de Paul Atreides) y Mick Jagger (que no se si haría de Feyd). A este magnífico grupo añadió la personalidad de Moebius para ser su singular director artístico con diseños a la altura de su talento. Qué pena que todo esto no tuviera ninguna consistencia, y que el propio Dalí terminase bastante cansado de las fantasías sin hechos de Jodorowsky, toda ellas sin duda bastante ambiciosas, pero geniales.

Después de esta intentona sin ningún éxito entró la figura de Dino de Laurentis a dar juego al proyecto. Este productor sería el que al final se quedaría con la adaptación, aunque pasaron muchos nombres hasta llegar a David Lynch. El primero y más importante fue el nombre de Ridley Scott. Éste había entusiasmado al productor por su visión inusual del futuro en Blade Runner. Por entonces Blade Runner no era una pieza de culto como lo es hoy, más bien era una obra de autor con un pésimo recibimiento a nivel de crítica y público. Pero algo vio en este relato apocalíptico Dino de Laurentis y buscó todos los medios para que Scott participase en su especial concepción de Dune.

Al final no llegaron a ningún acuerdo. Y es que Dune era una obra de productor, un hecho que viviría en sus propias carnes el propio David Lynch. ¿Pero cuándo entró Lynch en escena? Poco después, gracias a la magnífica participación de Rafaella de Laurentis. Ésta había visto la magnífica película "El Hombre elefante" y había quedado hechizada por la historia y por cómo Lynch la plasmaba en imágenes. Rafaella había pensado algo muy diferente para Dune, y veía en la figura de Lynch la posibilidad de dotar a los personajes de entidad y consistencia, no por nada éstos eran los verdaderamente importantes de la historia.

Una vez se decidió contratar a Lynch y éste accedió a dirigir Dune, el contrato se realizó para 3 películas, pensando en los buenos resultados comerciales del film. El actor protagonista sería el desconocido Kyle Maclachlan, que firmó por ¡¡5!! películas. Los productores apostaron por destinar todos los esfuerzos más que en el reparto (que era estelar) en la producción, que sería monstruosa.

El principal problema que se pudo apreciar en este conjunto de profesionales fue en el apartado de efectos visuales. En un primer momento John Dystra era el elegido. Un creador de efectos que había salido directamente de la factoría Lucas, y que jugó un papel importantísimo en Star Wars. Lo productores empezaron a hacer de las suyas y Dystra fue el primero en abandonar. Así, se buscó a un tal Van der Veere, que se dedicó a los efectos ópticos del film. Éstos, como se puede comprobar a día de hoy son bastante malos, siendo las escenas de batallas o de naves donde más se evidencia estas limitaciones. En cuanto al diseño de las distintas monstruosidades y su inserción en las imágenes se contrató a Carlo Rambaldi, padre de E.T.. Éste realizó un trabajo con claros y oscuros, ya que el diseño del Navegante se antojaba muy "muñeco", mientras que el de los Gusanos era excepcional, y a día de hoy ha perdurado la imagen de éstos cabalgando por las dunas como la más representativa del universo "Dune". La elección de Toto fue decisión personal de Lynch aunque pueda parecer extraño, y más adelante podréis encontrar unas declaraciones de David Paich al respecto, una de las cabezas visibles del grupo.

El rodaje estuvo plagado de anécdotas y vicisitudes, no sólo por las circunstancias del rodaje en desiertos que con sus tormentas podían ocasionar más de un retraso, sino por el sorprendente hecho de que DeLaurentis estaba produciendo dos películas épicas al mismo tiempo, y rodándolas en el mismo lugar. Conan El Destructor, la continuación de la magnífica película de John Millius, estaba rodándose a la par que Dune. Muchos de los actores de Dune comentaban como había ocasiones en que tenían que parar el rodaje porque en el set de Conan les hacía falta tal o cual material que ellos tenían. Es evidente que eso terminó molestando a Lynch (¿y a quién no lo haría?), por lo que la situación no fue muy idílica hasta el final del rodaje, aunque tampoco excesivamente tormentosa en comparación con algunos momentos más elevados de tono de otras producciones. Después de Dune, Lynch se prometió no volver a trabajar para un gran productor, algo que ha mantenido hasta nuestros días.

El estreno se saldó con una recaudación realmente desastrosa. Dune era un fracaso a vista de todos. La razón podría encontrarse en la narración farragosa y llena de metáforas ininteligibles que el director había depositado a lo largo del metraje haciendo honor al Lynch de Almuerzo al Desnudo, y no al de "El hombre elefante" que era lo que más se pretendía. Otra aportación que lastró esta película eran los fallidos efectos especiales. Salvo los "puppets" creados por Carlo Rambaldi, los demás desde luego no eran para nada revolucionarios, y vistos los creados para Star Wars, éstos eran más propios de un aficionado que de una superproducción. Hablando de Star Wars, puede ser que ésta también perjudicara a Dune de forma indirecta. Tal fue su boom que después de ella todas las películas ambientadas en el "espacio" debían tener su tonalidad "pulp" de "space opera", algo que desde luego Dune no aportaba. La sencillez de Star Wars chocaba con la farragosidad en los contenidos de Dune, la falta de simplicidad, y sobre todo la búsqueda de recursos que aportaban información redundante (la voz en off de Paul a modo de pensamiento), más que fácil y decisiva para entender la trama.

El fracaso casi mundial (en Francia fue un éxito total), provoco que Dune no tuviese ninguna continuación, y eso que esperaban hacer 5. Una pena.

De todas formas Dune ganó con el tiempo, al igual que otras producciones fantásticas que en su día fueron denostadas como The Thing de John Carpenter o Blade Runner de Ridley Scott. Dune no es tan efectiva como estas dos anteriores muestras, pero tiene una tonalidad "onírica" muy propia del director que es lo mejor y lo más destacable de un cuento irregular pero fascinante y que la convierte en una autentica "cult movie" más que el producto comercial que era, evidentemente, la primera necesidad de sus productores. Por todo esto Dune puede considerarse una de las piezas más singulares de su director que a pesar de ver limitada su libertad considerablemente, fue capaz de imprimir su sello personal y su manera de ver el séptimo arte. Eso es fidelidad a sus principios y es algo totalmente insólito en el cine comercial. De ahí que se podría decir que a pesar de todo, Dune es una obra de autor más que una superproducción, una obra de un autor que ama el cine, y su particular lenguaje.

La música de Dune

Muchos quebraderos de cabeza dio no sólo la confección de una película a todas luces personal y autoreferencial como la de Lynch, sino también encontrar un compositor, o grupo de rock, que realizase la banda sonora.

Fue únicamente el grupo Toto el que al final se llevó el gato al agua. Pero ésta no era una decisión de productores o de la diosa Fortuna. Toto estaba en el proyecto por petición personal del propio Lynch.

¿Pero quiénes eran Toto? Pues no un cantante, ni un compositor, sino un grupo de ellos, bastante buenos, por cierto. Toto era un grupo versátil que casi siempre terminaba habitando en la parcela del A.O.R, un estilo musical que con estas iniciales describen el verdadero enfoque de esta música, Adult Oriented Rock (Rock destinado a un grupo de edad adulto). ¿Pero cómo un estilo musical puede etiquetarse para una determinada edad? El A.O.R., ni más ni menos, es un rock pulido, trabajado, y confeccionado desde la profesionalidad, y desde el talento. La mayoría de los músicos que realizan composiciones para este estilo musical son unos artistas en todas las facetas musicales, desde la composición (a todas luces las mejores a nivel rockero), hasta la instrumentación y los arreglos. Aunque la principal característica de este tipo de grupos es tener a un Frontman con una voz increíblemente virtuosa, e ideal para los sonidos instrumentales creados por sus compañeros de grupo. Así la voz de un cantante de A.O.R. es lo más cuidado de la producción, nunca viéndose apagada por sonidos estridentes e inaguantables, que tan común se da en algunos grupos ratoneros.

Toto venía de un sólido y construido éxito gracias a un equipo perfectamente compenetrado, donde cada músico aportaba un talento desmedido, pudiendo encontrar varias voces solistas, aunque utilizaran más la magnífica voz de Bobby Kimball.

Así, Toto disfrutó de varios singles de éxito mundial como "Afrecha", "Hold the Line" (que en España Mahou utilizó para su campaña publicitaria) o "Rosanna". Su máxima cualidad era la magnífica fusión del A.O.R, y algo de toques jazzisticos, así como una increíble percusión, que poco después sería de vital importancia para la banda sonora de Dune.

Toto

- La Formación:

Jeff Porcaro - Batería/Percusión. Murió en 1992. Casi todos los discos que se editaron después están dedicados a su memoria. Una de las "almas" del grupo. Trabajó con Michael Bolton, Peter Cetera, Ray Charles, Cher, Eric Clapton, Joe Cocker, Bruce Springsteen, entre muchísimos artistas, y participó en gran cantidad de Bandas sonoras: Elegir un Amor, Dick Tracy, Black Rain, The Hudson Hawk y por supuesto Dune.

Bobby Kimball - El vocalista de todos los discos de Toto, salvo varias excepciones. Su voz es magnífica, aunque desde mi punto de vista, por debajo de la prodigiosa voz de Joseph Williams.

Steve Lukather - Guitarra/Vocalista: Es el centro de Toto. Él compone, canta, y toca la guitarra de forma magistral. Ha participado en un monton de discos de varios artistas como Asia, Michael Bolton, Peter Cetera, Cher, Desmond Child, Earth, Wind & Fire, Lara Fabian, David Foster, Aretha Franklin, Don Henley, Michael Jackson, Jefferson Airplane, Quincy Jones, Kenny Loggins, Richard Marx, Paul McCartney, Meat Loaf, Randy Newman, Lionel Richie, Diana Ross, Barbra Streisand, Van Halen y en bandas sonoras como Footloose, St. Elmo´s Fire, Back to School o Road House.

Steve Porcaro - Teclados. Junto a Steve Lukather y David Paich podrían ser los fijos de Toto. Ha trabajado con artistas tan importantes como Cristina Aguilera, Chicago, Ray Charles, Celine Dion, David Foster, Julio Iglesias, Michael Jackson, Elton John, Quincy Jones y en bandas sonoras como la serie de Twilight Zone, St. Elmo´s Fire y colaborando con James Newton Howard en Outbreak, The Sentinel, Primal Fear, Waterworld y Metro.

David Paich - Teclados/Sintetizadores/Vocalista: Ha trabajado junto a Bryan Adams en dos recopilatorios, So Far So Good y Best of Me. También con George Benson, Cher, Chicago y Joe Cocker. Ha estado en absolutamente todos los discos de Toto y es sin duda el alma de Dune.

Joe Williams - Vocalista en Farenheit y Seventh One. Una voz prodigiosa, hijo del gran maestro John Williams. Ha colaborado con Peter Cetera y Chicago, componiendo bandas sonoras para televisión como Poison Ivory Part 2, Embrace Of The Vampire, Last Gasp, Champions, o participando con su voz en Los Goonies o en El Rey León. Tiene varios discos en solitario como "3", "Look at me" o "I am Alive". Actualmente se encuentra promocionando el primer disco de su actual grupo, "Vértigo".

Mike Porcaro - Bajo. Ha colaborado con Cher, Dionne Warwick, Aretha Franklin, Julio Iglesias y Steve Perry. Ha participado en las bandas sonoras de Kung Fu, Grease, Metro o Love At First Bite. Es hermano de Jeff y de Steve.

David Hungate - Bajo. Es el bajista de varios disco de Toto. Un músico itinerante que ha trabajado con Bryan Adams, Cher o Joe Cocker, y en las bandas sonoras de Grease, The Horse Wishperer o Xanadu.

Simon Phillips - Batería/Percusión. Sustituyó a Jeff Porcaro, después de la triste perdida de éste. Ha sido colaborador habitual de Mike Oldfield y ha participado en casi todos sus discos, incluida la banda sonora de The Killing Fields. También ha participado con Richard Marx, Mr. Big, Judas Priest, Mick Jagger, Asia, Brian Eno, Peter Gabriel, Phil Manzanera, Trevor Rabin y Joe Satriani.

Fergie Frederiksen - Vocalista. Ha sido el vocalista de un único disco de Toto, Isolation, también participando en algunas voces con Joseph Williams en Farenheit, como ya había hecho en el disco en solitario de éste último, "3".

- Los discos:

	Toto (1978): El primer disco del grupo. Nada más empezar tenemos un temazo instrumental que sería el antecedente claro de "Dune". El tema es "Child´s Anthem". El resto del disco gira en torno al sonido "West Coast", cercano a Chicago, aunque con más reminiscencias poperas. En este disco podemos encontrar un tema que ha sido como un Himno para el grupo, "Hold the Line". Uno de los mejores temas de su historia. Entre los mejores temas encontramos los dos ya citados, más "Taking it Back", la bella balada "Angela" o la funky/jazzística "Georgy Porgy".
	Hydra (1979): Un grandísimo disco. Aquí ya podemos apreciar como el sonido "Toto" va construyéndose. Protagonismo de las melodías, de los cambios de tiempo, de las geniales inserciones vocales, y de una composición exquisita. Los temas son mucho más largos y la importancia de la musical instrumental alcanza cotas difícilmente vistas en otros discos, al más puro estilo del rock sinfónico de calidad, con algunas reminiscencias de Supertramp o Foreigner. Entre sus mejores temas destacan "99", "Hydra", "A secret Love", y "St. George and the Dragon".
	Turn Back (1981): Es, tal vez, el álbum menos conocido del grupo, pero el que tiene una aureola de disco de culto entre los seguidores de Toto. Aquí el grupo buscó un sonido muy específico, rockero, que pudiese funcionar fácilmente en los conciertos. Entre los temas más destacables tenemos "Gift With A Golden Gun", "English Eyes" y la exquisita balada "If It's The Last Night". Tal vez no sea un disco para recomendar a ciegas, pero a buen seguro que si te gusta, no lo soltarás en ningún momento.
	IV (1982): Un discazo, un clásico del grupo. A nivel de crítica puede ser el mejor, incluso para muchos aficionados. De hecho, dos grandes canciones que han pasado a la historia están aquí, "Rosanna" y "Africa". Tampoco nos olvidemos de momentos tan conseguidos como "Make Believe" o "I won't Hold you Back". Un disco con un eminente sonido de rock ochentero, donde ya estaba plenamente definido el estilo del grupo. Un Imprescindible.
	Isolation (1984): Un disco que no es adecuado para todos los paladares, principalmente por ser eminentemente A.O.R (es el disco más rockero de la discográfica de Toto junto a Kingdom of Desire) y por la voz de Fergie Frederiksen, que es más aguda y rajada de lo habitual, situando este disco próximo a sonoridades más familiares a grupos como Survivor (creadores de la magnífica canción de "Eye of the Tiger" de Rocky III). Esa vena jazzística de Toto que se puede escuchar en Tambu, desaparece aquí por completo, perfeccionando el sonido pop de Seventh One y Farenheit, para subir un escalón más al rock más trabajado. Las mejores canciones de este disco son: "Stranger in Town", "How Does it Feel", "Isolation" y "Holyanna". Aquí tenéis los créditos de este disco para que veáis que hay más de un nombre conocido: The London Symphony Orchestra Toto - Productor James Newton-Howard - Arreglos Tom Scott - Saxofon Niko Bolas - Ingeniero de sonido Lenny Castro - Percusión, Conga Michael Cotten - Sintetizador Chuck Findley - Trompeta Fergie Frederiksen - Vocalista Gene Morford - Bajo (Vocal), Vocalista Jerry Hey - Trompeta Tom Kelly - Vocalista (bckgr) Bobby Kimball - Vocalista , Vocalista(bckgr) Tom Knox - Ingeniero de Sonido John Kurlander - Ingeniero de Sonido Greg Ladanyi - Ingeniero de Sonido Steve Lukather - Guitarra, Vocalista Richard Page - Vocalista, Vocalista (bckgr) David Paich - Teclados, Vocalista Jeff Porcaro - Percusión, Batería Steve Porcaro - Teclado, Vocalista Mike Porcaro - Bajo, Chelo Bill Murphy - Diseño de Carátulas Dyer Kahn, Inc. - Diseño de Carátulas Robert Kopecky - Ilustraciones
	Farenheit (1986): El primer disco de Joseph Williams. Después de la sustitución de Bobby Kimball, el grupo buscó a un nuevo cantante, y la verdad es que su elección fue certera. Williams, hijo del gran maestro John Williams, fue el recambio perfecto para un grupo que no sintió para nada esta baja, más que nada porque el alma de Toto estaba todavía en manos de Steve Lukather y Jeff Porcaro. La voz de Williams era una cascada de melodías, perfectamente modulada y ajustada a una magnífica interpretación de todos los miembros, con especial sentido en Steve Lukather que ya aportaba su voz en alguna que otra canción. Las canciones más destacadas de este álbum son: "I'll Be Over You", la magnífica "We can Make it tonight", la instrumental "Don't Stop Me Now" o "Lea".
	Seventh One (1988): Tal vez sea uno de los discos más alabados del grupo, y para mí, el mejor. ¿Por qué? La composición es magnífica, así como la instrumentación. Ahora bien, el secreto está en la voz. Joseph Williams está en un gran nivel después de Farenheit, aunque Seventh One supone el último disco del cantante para Toto. ¿Por qué lo dejó? Williams se quejaba de que su voz estaba seriamente resentida después de actuar cada noche en conciertos para promocionar los discos. Como anécdota, Williams se dedicó a hacer bandas sonoras para determinados telefilmes de televisión, y ahora ha vuelto a la escena A.O.R. con un nuevo grupo, Vertigo, cuyo nuevo disco "Vertigo", está teniendo un cierto éxito dentro de este mundo musical. Los mejores temas de Seventh One son: "Pamela" con sus geniales cambios de ritmo, "Stop Loving You", una canción perfecta, de las mejores del grupo, la más destacada del disco, y "Straight for the heart" o "Only the Children".
	Kingdom of Desire (1992): Tal vez uno de los discos de Toto más difíciles de encontrar. Es un trabajo por y para Steve Lukather, donde las guitarras adquieren un poder sólo igualado en "Isolation", aunque incluso a veces más Hard rockero. Es otro disco que puede desplazar un tanto a aquéllos que no son muy amantes de las guitarras eléctricas. Steve se encarga de ser el vocalista de todas las canciones, de ahí su importancia en el disco y de ese toque tan rockero. Entre sus mejores temas estan "Don´t Chain my Heart", el baladón a lo Bon Jovi "2 hearts", "The Other Side", u "Only You". No nos olvidemos tampoco de la aportación instrumental "Jake to the Bone".
	Tambu (1996): Un discazo, otro de los mejores CDs del grupo. Después de varios años sin sacar ningún disco de estudio, sólo recopilatorios o directos, el grupo se decide a componer un nuevo disco, eliminando todas las aportaciones Hard rockeras de "Kingdom of Desire" y decantándose por sonidos pop/jazzísticos, sin olvidar evidentes pinceladas de música africana, con una percusión a su medida. El disco tiene maravillas como la gran balada "I Will Remember", o la canción de apertura "Gift of Faith", sin olvidarnos de "Other end of Time". Un disco bastante recomendable.
	MindFields (1999): El penúltimo disco de estudio del grupo. Es el más variado en cuanto a estilos, pero a causa de eso se me antoja demasiado irregular. Bobby Kimball vuelve al grupo, con una voz mucho más rajada y rockera, aunque manteniendo las mismas señas de identidad que utilizase en los mejores discos de Toto. Destacan "Mad Aboud You" y "Spanish Steps". Sin duda, siendo un disco de Toto está a gran nivel, pero desde luego, no a la altura de los grandes discos del grupo.
	Through a Different Glass (2002): Un disco de versiones para el siguiente disco de estudio del grupo. Después de MindFields no es que la cosa fuera muy positiva para el grupo. Se ve cierto cansancio, y falta de esa chispa característica en la composición. Aquí se dedican a versionar clásicos de Bob Marley, Elton John o Bob Dylan entre otros. Las versiones son muy buenas, no por nada son grandes músicos, pero sinceramente, uno preferiría algo nuevo, que algo ya oído.

- Dune, una banda sonora de referencia

No sería hasta después de que realizase esta película, que Lynch aportaría una visión más personal que marcaría su carrera hasta el final. Después de Dune, nos regalaría ese relato surrealista y angustiante que es Terciopelo Azul, película que marcaría el inicio de una excelente relación profesional con su compositor habitual, Angelo Badalamenti. Hasta entonces Lynch demostró su gusto en la composición musical contratando a John Morris en El Hombre Elefante (para muchos una obra maestra), y en Dune dirigiendo a todo un grupo de rock.

En la magnífica banda sonora realizada por Toto, podemos encontrar una percusión perfecta, y un uso de la composición inusitada, muy poco mostrada (por no decir, nada) en sus discos como grupo A.O.R. Los sonidos eran propios de un compositor consagrado, un Williams, un Goldsmith, o más bien, un James Horner. Así, el grupo creó unos sonidos grandiosos, con unos coros que cumplían su función de magnificar las imágenes en aquellos momentos más espectaculares. En los momentos románticos los teclados de David Paich hacían una función excepcional y ya no digamos los tenebrosos, el verdadero motor de la composición de Toto, donde las imágenes de Lynch alcanzaban otro nivel. A esta magnífica composición, se le unió un productor musical y compositor inglés, Brian Eno, que se movía en el mundo del New Age o en sonidos pop más innovadores, y que participó con uno de los mejores temas de la banda sonora, "Prophecy", un tema que ya aparecía en uno de los discos anteriores del compositor. Amplio, onírico, a veces tenebroso, a veces limpio y luminoso, era una impresionante aportación al sonido de la película, un sentimiento que cuadraba con los extensos campos de dunas de Arrakis. Si habéis leído la entrevista a Brian Tyler, podéis confirmar la admiración del compositor por este tema, y su intento de cohesión de sonidos en el universo de Dune, al incorporarlo en su magnífica composición para Children of Dune.

- David Paich, el alma detrás de Dune

Ciertamente Toto, como grupo, fue el creador de esta inmejorable BSO, pero detrás de todo, como alma creativa, teníamos a David Paich, el teclista de Toto, y compositor de muchas de sus mejores canciones. Tal ha sido la implicación de David en este proyecto que viendo la deficitaria edición (en cuanto a minutaje) de Dune realizada por Polygram, en 1997 produjo la nueva edición del score, a manos de la compañía Pendulum. David hablaba al respecto:

"Mi primer encuentro con David Lynch se produjo en el año 1983. Volaba hacia Méjico para entregarle una "demo" que había grabado el grupo Toto con la esperanza de poder utilizarla en la nueva película del director, una adaptación cinematográfica de la obra de Frank Herbert "Dune". Esa misma "demo" puede escucharse en este álbum, más concretamente en el antepenúltimo corte.

Cuando me encontraba pasando la aduana, era como si se nos estuviera permitiendo "salir de la cárcel sin necesidad de papeles". Rápidamente nos hicieron pasar la aduana por delante de todos los que se encontraban allí. Aquella tarde se requirió mi presencia en un restaurante "muy conocido" de Méjico que, pensé, Rafaella De Laurentis, la productora, habría reservado hasta que terminara el rodaje de la película.

Mientras David Lynch se levantaba y me daba la mano la primera cosa que me preguntó fue: "¿Tendría algún inconveniente en hacer las grabaciones en Moscú?", a lo cual repliqué: "Suena interesante. ¿Hay algún teléfono por aquí?" E inmediatamente le hice una llamada a mi padre Marty para saber su opinión a la petición del director. "Podemos traer a Andre Previn y hacer que se encargue de las labores de dirección. Sé que habla ruso", sugirió David Lynch. "Sin problema", asentí yo.

Decir "sin problema" era en realidad quedarse corto, teniendo en cuenta la tarea que me aguardaba. Más tarde hice que Rafaella y David escucharan la "demo". Ambos asintieron satisfechos. Más adelante, aquella misma tarde, en una fiesta, David Lynch me puso en unos auriculares la séptima de Shostakovich. Me dijo alzando la voz: "¿Le gusta este tipo de música?", a lo cual respondí "Me encanta". Entonces me dijo: "Entonces ¿sabes el tipo de música que quiero?", y yo respondí con un rotundo "¡Sí!".

Durante los siguientes seis meses, junto con mis colegas de Toto, compuse la música que podréis escuchar en este CD. Las únicas condiciones impuestas por David Lynch eran que la música tuviera un "tempo lento y calmado". Únicamente alzó la voz una vez (fue cuando escuchó el sonido de un arpa que se había filtrado en las pistas de cuerdas. Él odia las arpas).

Este álbum está dedicado a mi padre Marty Paich, el cual orquestó y dirigió junto con Allyn Ferguson la música de la película, así como también a Jeff Porcaro, el cual creó el concepto original de percusión. Quisiera dedicarlo muy especialmente a Frank Herbert, el escritor de Dune. Fue en verdad una experiencia única y excepcional.

Recomiendo encarecidamente que nadie intente casi emular a Prometeo de este modo en su primera banda sonora para una película, pues estaría engañándose en un exceso de falsa autoindulgencia."

David Paich

Nosotros haremos balance de esta magnífica edición, que describe milímetro a milímetro la composición de Toto para esta singular película.

- Valoración tema a tema:

1. Prologue/ Main Title: La película se abre con un prólogo a cargo de la Princesa Irulan, hija del Emperador. Aquí nos pone en antecedentes de qué es Dune (que se ve fusionado con su bella imagen, ya que ésta no es otra que Virginia Madsen) y de qué es la Especia... así como la profecía sobre el Kwisatz Haderach. La música de Toto es sutil, y alcanza paulatinamente una melodía que está asociada al planeta Dune. Una vez termina la princesa de hablar, los Main titles hacen acto de aparición con el tema principal, magnífico, muy orquestal con ayuda de la guitarra eléctrica de Steve Lukather, y de los coros de Viena. Uno de los momentos más impresionantes de la partitura.

2. Guild Report: Un tema muy corto (apenas 0:55) que incide en el tema de Dune. La Cofradía, representada por un Navegante, se comunica con el Emperador, buscando la muerte de Paul Atreides, algo que desconcierta al Emperador y pone sobre aviso a las Bene Gesserit.

3. House Atreides: Este tema empieza con los coros en una tonalidad de cierto tono noble y legendario, para después pasar a sonidos más incidentales, pues la princesa durante este tema describe a la Casa de Atreides, viendo el espectador los bellos pasajes de Caladan, en un símil a la aristocracia medieval con ese gran castillo.

4. Paul Atreides: Durante el disco veremos cómo el tema de Paul adquiere diversas tonalidades y variaciones. En esta caso vemos cómo Paul representa al Durmiente... aún no despertado, de ahí que Toto desarrolle una música donde se describe a la perfección esa situación mental de Paul, es decir, esa sensación de música contenida.

5. Robot Fight: Este corte es de difícil audición por estar sustentado exclusivamente en percusión electrónica. Los teclados de David Paich y Steve Porcaro se suman al final del tema para describir la fortaleza física y mental de Paul.

6. Leto's Theme: Por primera vez se ve al padre de Paul (Jürgen Prochnow), el duque Leto. Éste habla con su hijo regalándole una frase que perdurara hasta el final de la película: "El durmiente ha de ser despertado". La música describe la nobleza del espíritu de Leto, siendo uno de los temas más clásicos de la partitura de Toto.

7. The Box: La clave de este tema son los sintetizadores que describen cierta maldad. La Reverenda Madre fuerza a Paul a una prueba de control mental. Meter la mano en una caja, donde sufrirá los dolores más inimaginables. El crescendo de los sonidos amenazantes frenan en seco cuando Paul supera la prueba siendo capaz de enfrentarse a la propia Reverenda Madre.

8. The Floating Fat Man (The Baron): Es el tema del Barón Vladimir Harkonnen. Es el tema que más aportaciones tenebrosas tiene de toda la partitura, con un órgano desatado en la tradición de Bach. Sinceramente no es un tema que se caracterice por su sutilidad, pero aún así, se le reconoce cierta eficacia en la propia escena, mientras el Barón no para de reír sarcásticamente flotando en la habitación.

9. Departure: Si cambiásemos las imágenes espaciales por unas de un barco en un mar ilimitado, la música seguiría quedando que ni pintada. Un tema muy melódico antecedente de cierta sensación de inquietud, tal vez por lo que se le avecina a la Casa Atreides, para nada heroico. Los Navegantes preparan el viaje de la Casa Atreides hacia Dune, donde regentará la buena distribución de la Especia en todo el universo.

10. The Trip To Arrakis: La tonalidad de la música se vuelve ciertamente más enigmática aquí. Este tema hace referencia al viaje que hacen Leto y su hijo por el planeta Arrakis, una vez que se han vestido los Destiltrajes (Paul sorprendentemente bien para ser la primera vez). Los coros son los protagonistas del corte, aportando un sonido ciertamente sacro.

11. Sandworm Attack: El primer tema que nos adelanta lo que serán los temas de acción de Toto para la partitura, aunque éste no pueda considerarse estrictamente como tal. Aquí cualquier aficionado podría tener dudas sobre las capacidades en este terreno de un grupo que se mueve más en la composición pop-rock. Para despejar todas esas duda, el planteamiento de estos temas son los mismos que seguiría un compositor consagrado. Una percusión a base de tambores, y una asignación con ciertos aires heroicos para Leto, al final del mismo, con un estupendo uso del "tempo".

12. The Betrayal/ Shields Down: Este tema describe la traición del Doctor Wellington Yueh (Dean Stockwell), hacia la casa de Atreides, a causa de un chantaje por parte del Barón Harkonnen. El tema empieza sutilmente, con un aire muy incidental para después subir a una tonalidad de batalla que se representara perfectamente en el siguiente tema.

13. First Attack: El primer tema de acción estricto de Toto para la partitura. A base de una poderosa percusión, aportando un cierto ritmo que finalmente derivará en sonidos más propios del grupo, gracias a esos súbitos cambios de ritmo. Es uno de los mejores temas de la partitura y posteriormente se repetirá en la batalla final.

14. The Duke´s Death: Un adagio que utiliza el tema de la Casa Atreides, en una de las mejores interpretaciones de este "Leit Motiv". Finalmente Leto ha sucumbido a las malas artes del Barón Harkonnen, gracias a la inestimable ayuda del traidor. A Paul y a su madre les espera ahora un futuro totalmente incierto, pero aunque no lo sepan, sólo será el camino para despertar al durmiente.

15. Sandworm Chase: un tema del todo descriptivo, donde el ritmo de la percusión establece una cierto aire cadencioso y paulatinamente más amenazante para Paul y su madre que se ven desprovistos de cualquier ayuda para salir bien parados de la persecución del Gusano. Menos mal que una mano se tendera rápidamente para una rápida salvación.

16. The Fremen: Extrañamente este tema no aparecía en la primera edición de la partitura, y es una presentación del tema de esta singular raza de nativos, un tema que aquí es tocado sutil y levemente, como antesala de lo que será el "Desert Theme", el tema más famoso de Dune, que no es otro que el tema de los Fremen tocado en toda plenitud de sonidos. Paul y su madre han dado con los Fremen, una raza muy suya que guarda con mucho celo su unión como tribu y sus costumbres. Pero Paul no es un habitante cualquiera del desierto, es el durmiente.

17. Secrets of the Fremen: Este tema no aparece durante la escena. Supongo que David Paich decidió incluirlo en la edición a pesar de no figurar en la película. Los Fremen descubren a Paul el mayor de sus secretos, la gran cantidad de agua que se encuentra debajo de las dunas de Arrakis. El tema es precioso, de una belleza inusitada, uno de los grandes momentos del disco, aunque no es otro que el tema de amor de Paul y Chani que se podrá escuchar en toda su plenitud a partir del siguiente corte. Chani es una de las habitantes del desierto, una Fremen que pasará a ser la Concubina de Paul (aunque en la película de Lynch se presente como su mujer).

18. Paul Meets Chani: Un tema de gran belleza como he comentado antes. Este tema le sirve a Lynch para describir un transcurso de tiempo considerable, ya que al término de éste (cortado abruptamente, para nada utilizado en su totalidad), Paul ya se presenta como un maestro de armas sónicas para los Fremen, además de describir la formalización de la relación con Chani en una pasión desmedida (Paul dice por medio de una voz en off que ha amado siempre a Chani). Lo mejor del tema es el giro final hacia el leit motiv de la casa Atreides, y es que Paul aparece recogiendo el testigo de su padre en una escena que evidencia totalmente sus cualidades como líder. Uno de los mejores temas del CD.

19. Destiny: Paul enseña a los Fremen el uso de las armas sónicas. Su destino es ser el líder de los Fremen, y para ello deberá de llevar a cabo una tradición ancestral, domar al gusano. Este tema es de preparación, y bastante incidental.

20. Riding The Sandworm: ¡¡¡Wwwooooaaauuuuaa!!! Aquí Steve Lukather se sale. Las guitarras de este talento innato son las verdaderas protagonistas de esta magnífica escena. Paul es un Caballero de Arena, un jinete de Gusano, capaz de domar a este "Viejo de las dunas" hacia donde él desee. A partir de ahí, la fuerza del score de Toto sólo va hacia arriba.

21. Reunion With Gurney: El tema de los Fremen tocado con cierto aire heroico, gracias, de nuevo, a las singulares guitarras de Lukather. Aquí Paul encuentra a Gurney, su maestro de Armas (interpretado por el capitán Picard, Patrick Stewart).

22. Prelude (Take My Hand): El tema de Paul y Chani tiene aquí otra interpretación, más melódica, más popera tal vez. Es otro de los grandes temas de Toto, el segundo single después de Desert Theme.

23. Paul Takes the Water of Life: Paul sabe que será necesario beber el agua de la vida para dirigir a los Fremen a una victoria segura. Sabe que es su destino, pues ha estado presentándose a él desde que ha tenido visiones de su futuro. La composición se basa en un sintetizador denso cortado variablemente por sonidos metálicos a modo de atípica percusión. Es un tema muy atmosférico y que consigue perfectamente esa sensación etérea de la posible muerte que se abalanza sobre Paul. Un grito final a cargo de la guitarra cierra el tema.

24. The Sleeper has Awekened!: La percusión de metal del anterior tema, junto con ese sonido atmosférico abre este corte. Paul ha sobrevivido al agua de la vida. Ahora es el Kwisatz Haderach y Toto describe esta nueva situación con una subida de sonidos a cargo del sintetizador y de nuevo la guitarra. Los cortes 23 y 24 son como hermanos gemelos.

25. Big Battle: Es el TEMA de ACCIÓN de la partitura. Su comienzo es espectacular, a base de una percusión a base de tambores que cada vez se hace más presente, con una aportación paulatina del tema de Dune. Lo mejor es el cambio de ritmo típico en Dune a base del piano a eso de la mitad del corte, para terminar en una algarabía de sonidos con la incorporación de los coros. Un sonido épico que convierte el tema en lo mejor del disco.

26. Paul Kills Feyd: Me encanta la utilización de la percusión en este tema, un claro precedente de la banda sonora de Akira. Hay momentos en algunas composiciones cinematográficas, en que la música es tan descriptiva que hay ciertas acciones visuales que están totalmente descritas por la música, y que cerrando los ojos podemos imaginar con total certeza. Así, la lucha con cuchillos (los Crys Fremen), tienen una descripción musical perfecta de los giros de muñeca de sus combatientes buscando sesgar la vida del adversario. Magnífica esta percusión. Paul mata a Feyd (Sting), el último reducto de la casa Harkonnen, demostrando al Emperador que sus años de dominio han terminado.

27. Final Dream: Paul sabe que la Especia no fluirá si él no quiere. La película termina con un Mesías liberador de una raza superviviente, un final bastante más esperanzador que el del libro, evidentemente porque éste último abre las puertas para una continuación que tuvo lugar, a diferencia de la película de Lynch. Toto utiliza de nuevo el tema de la Casa Atreides como a sabiendas más que del propio Lynch sobre lo que acontece al final del libro. En realidad, Paul mantiene su herencia y asume el papel de heredero directo de la casa Atreides, más que ser el Mesías de los Fremen. De ahí la elección por parte de Toto de utilizar ese tema y no el de Dune, que dejará para los títulos de crédito. La historia termina, pues el durmiente ya camina con nosotros. Ahora será el tiempo de otras historias.

28. Dune (Desert Theme): Éste sí es Toto. Aquí tenemos el sonido de Toto en estado puro, eso sí, sin desligarse en ningún momento del sabor que ha aportado a las imágenes durante todo el metraje. Es el tema de los Fremen pero en una interpretación mucho más popera, más de rock sinfónico. Uno de esos End Titles que más hemos repetido en la cadena de música.

29. Dune (Demo Version): Una versión bastante pobre en cuanto a instrumentación y sonido. Está tocada a teclados, y fue el demo que Toto remitió a Lynch para que se hiciese una idea del concepto musical que tenía pensado para Dune. Son los Main Titles de Dune, y no el Desert Theme. Es aconsejable a modo de curiosidad.

30. Take my Hand: El segundo single de Toto que sale justo antes del Desert Theme en la película, a modo de presentación de los actores al final de la misma. También es una interpretación popera del tema de Paul y Chani, con una composición totalmente diferente, supongo para una distribución más comercial que efectiva con las imágenes. De todas formas es un magnífico tema. De los grandes de la partitura.

Para aquéllos que también estén interesados en la primera edición de la banda sonora a cargo de Polygram, por la reivindicable aportación de Brian Eno con el tema "Propechy Theme", comentaros que en nuestro país la podéis encontrar siempre a un precio reducido, y que por lo menos es superior en cuanto a sonido a la edición de Pendulum. Éstos son los cortes que integran la edición:

Prologue Main Title Robot Fight Leto's Theme Box Floating Fat Man (The Baron) Trip to Arrakis First Attack Prophecy Theme - Brian Eno

Dune (Desert Theme) Paul Meets Chani Prelude (Take My Hand) Paul Takes the Water of Life Big Battle Paul Kills Feyd Final Dream Take My Hand

- Créditos de una epopeya musical galáctica

David Paich - Teclados
Jeff Porcaro - Batería y Percusión
Steve Porcaro - Teclados
Mike Porcaro - Percusión, Bajo Eléctrico y Acústico
Steve Lukather - Guitarras

Álbum Producido por David Paich y Ford A. Thaxton
Originalmente Grabado y Mezclado por Tom Knox y Al Schmitt
Grabación adicional por Greg Ladanyid y Geoff Workman
Adaptación y Música adicional de Marty Paich
Interpretada por Vienna Symphony Orchestra
Dirigida por Marty Paich y Allyn Ferguson
Orquestaciones adicionales por Allyn Ferguson
Coro: The Vienna Volksoper Choir

Frank Herbert's Dune

Compositor : Revell, Graeme
Año : 2001
Distribuidora : Gnp Crescendo

Dune, la Miniserie

Estaba claro que la visión de David Lynch sobre la obra de Frank Herbert era bastante personal, y para muchas miradas bastante deficitaria. Algunos pasajes eran descritos fugazmente o sencillamente con recursos visuales que sólo el director parecía entender (la naturaleza de los Navegantes, o el agua de la vida, entre otros muchos conceptos). Sin duda alguna la ambientación, y ese sabor onírico que imprime en casi todas sus obras eran los elementos a retener en la memoria, pero la poca definición del mundo de Herbert hizo imposible considerar a esta adaptación totalmente definitiva.

Es por eso que durante muchos años se estudió la posibilidad de llevar a cabo una mejor visión de este universo, eso sí, bastante tiempo después de que pasaran los malos resultados que había obtenido la película de Lynch y ciertos productores vieran la posibilidad de sacar tajada.

Finalmente fueron dos productoras unidas, "Victor Television Entertainment" y "Epsilon TV Productions", las que llevando como bandera la máxima de "la unión hace la fuerza", llevaron de nuevo la historia a la pantalla, pero no grande. La decisión de hacer una miniserie de tres capítulos (como los tres grandes volúmenes en que se divide el libro, es decir: Dune, Moad´ Dib y El Profeta), para television era la decision más viable, sobre todo para respetar la obra de Herbert, casi imposible de reflejar en dos horas de metraje.

El director elegido fue John Harrison, director de varias miniseries televisivas, así como compositor de cine, casi siempre relacionado con el mundo del terror y partituras tales como "Creepshow" o "Tales from the Darkside". Seguidor de la obra de Herbert, para los papeles principales eligió al desconocido Alec Newman como Paul Atreides, William Hurt como el Duque Leto Atreides, Ian McNeice como el Baron Harkonnen, o Giancarlo Giannini como el Emperador.

Los Primeros Problemas

El principal problema que se encontró Harrison para hacer frente a tamaña empresa fue rodar en el desierto. Con un plan de rodaje muy estricto, y unas fechas de entrega ajustadas, propias de la televisión, este director se veía imposibilitado a rodar la miniserie en el desierto por miedo a sufrir innumerables contratiempos en forma de tormentas de arena que destrozarían irremediablemente los equipos.

Así que decidió ir a Praga, donde comenzó su cruzada rodando todo los exteriores en decorados. Esa decisión buscó perfeccionarse a través de la visión única de un director de fotografía varias veces galardonado con el Oscar (Apocalipsis Now, El Último Emperador o Rojos), Vittorio Storaro. Para introducir al espectador en las arenas de Dune, este director de fotografía ideó un extenso mural, a base de fotografías de África, realizadas por él en sus viajes, que serviría de fondo de un Dune de cartón piedra. La iluminación haría el resto.

Otra aportación de Vittorio fue el "translight" que consiste en la variación de la intensidad de la luz, o incluso la tonalidad de ésta, en un mismo plano. La perfección de este tipo de fotografía se podría encontrar en muchos planos donde podríamos encontrar tres niveles de iluminación con sus correspondientes colores, casi siempre aplicados en las visiones de los protagonistas, producidas por el consumo de Especia.

La elección de Praga como lugar de rodaje supuso una elección a todas luces efectiva. Se eliminaban los problemas de depender del medio natural para poder rodar, con el consiguiente retraso en la producción, y se reducían innumerables costes. Los escenarios eran ricos en detalles, dependiendo de donde nos encontrásemos, ya fuese en Arrakis, en Caladan o en Giedi Prime, todo gracias a la mano de Miljen Kreka Kljakovic.

En cuanto al vestuario se eligió a Theodor Pistek, dando un matiz muy colorido al conjunto, y mucha importancia a lo excesivo.

Y finalmente se escogió a Graeme Revell, en una aportación que comentaremos más adelante.

Un conjunto final irregular

Plasmar la obra de Herbert es una tarea bastante complicada. Ese sabor filosófico, religioso, o épico, es muy aprovechable en el ámbito cinematográfico, pero también muy complicado por la necesidad de explicar una serie de conceptos para nada fáciles de asimilar.

Estos conceptos tienen una serie de denominaciones que se dan por reconocidas en el espectador, y efectivamente esto reduce notablemente el espectro de espectadores que estarían dispuestos a aportar mucho de su parte para seguir la trama. Éste sería a priori el principal problema a salvar por cualquier adaptación del libro, intentar hacer digeribles y fácilmente asimilables esos conceptos. Pero de nuevo, no es el caso de esta miniserie. Eso sí, es cierto que gracias a las casi cuatro horas de metraje, el director puede plasmar muchos conceptos de forma mucho más definida de lo que lo hizo Lynch (aunque ciertamente Lynch tampoco es un director que dé las cosas mascadas, todo hay que decirlo).

Otro gran inconveniente es la logística para llevar a cabo este gran proyecto. Si bien es cierto que el presupuesto estaba limitado, y que había unas fechas definidas para terminar la filmación, la elección por parte de Vittorio Storaro de un mural gigantesco que hiciera las veces de desierto, fue desde mi punto de vista, totalmente equivocada, y sacaba al espectador de toda la narración, que asiste perplejo al hecho de que las arenas de Dune eran en verdad un mero plató.

El mayor problema es que ese decorado, o está mal iluminado con la máxima intención, buscando que el espectador se dé cuenta de que esto es un plató y consiguiendo así un conjunto visual singular, o más bien es un fallo garrafal que desvirtúa los mejores y más importantes planos.

Otra justificación que utiliza John Harrison para usar este gran mural es la de la falta de integración que tiene el actor con la historia si se abusa de las pantallas azules. Yo pienso que esto simplemente es una afirmación totalmente aceptable de un director que tiene que justificar una falta de presupuesto evidente, y es que Dune no es una adaptación barata, ni mucho menos. La utilización de múltiples pantallas azules para describir todos los pasajes que no se han podido rodar en un medio natural, podría desvirtuar ciertamente las interpretaciones de los actores, pero no mucho más que un mural a base de fotografías. Lo que sí conllevaría sin duda es un incremento del presupuesto.

Una vez que la acción pasa de las dunas de Arrakis, a decorados más localizados, la narración se intensifica, así como el interés del espectador, que ve cómo la trama le absorbe, más gracias a ésta, que a las diferentes aportaciones técnicas.

Y es que John Harrison no es precisamente un director efectivo, y más para el terreno de la ciencia-ficción. Su amplitud de planos en las escenas de decorados son demasiado frías. La inclinación de planos en la casa de los Harkonnen es más fruto de las buenas ideas de Vittorio Storaro que del propio director.

Hay planos magníficos con otros realmente pobres, propios de un aficionado. Los actores en su mayoría cumplen, destacando a Alec Newman, como un Paul Atreides que para nada está por debajo de Kyle Maclachlan, de hecho se le ve con mucha más fuerza, mucha más garra que el otro. William Hurt realiza una muy buena interpretación, pues no por nada es un declarado fan del libro de Herbert. La concubina de Moad´Dib, la actriz Barbora Kodetová es un gran descubrimiento. Otros actores sólo aportan excesos interpretativos, como el Navegante, o alguno de los Harkonnen.

A nivel de efectos especiales, el nivel es eficiente para el año en que se realizó la miniserie y para tratarse de un producto televisivo, aunque tampoco es para tirar cohetes.

¿Y la historia, hay cierta cohesión con el universo de Herbert?

La desaparición de las lagunas

¿Por qué el agua de la vida es especial para Paul? ¿Por qué es un veneno? ¿De dónde proviene? ¿Qué es la Cofradía? ¿Cuál es el papel de los Fremen en esta odisea? ¿Por qué los consumidores de Especia tienen premoniciones?

Muchas de estas preguntas o bien no se respondían en la película de Lynch, o bien se hacían de una manera bastante personal, y por ende, bastante confusa.

La miniserie sin duda es una genial adaptación de la obra de Herbert, tal vez sólo haya un elemento que se obvia, y tal vez sea por motivos presupuestarios. Éste no es otro que el arma sónica que utiliza Paul para potenciar las habilidades de los Fremen. Aparte de esto, todo lo demás es una perfecta adaptación del libro, con pasajes casi idénticos, e incluso con estrofas del libro directamente vertidas en las imágenes (como es el caso de las frases que dan fin a la historia).

Gratificante es enterarse de qué es el agua de la vida, y de por qué actúa en Paul de forma diferente al resto de las Bene Gesserit. Las costumbres Fremen son el centro del relato, y tienes la sensación de salir del visionado con un conocimiento total de cómo se comportan los Fremen, cuáles son sus ideales y sus rudimentarias y eficaces técnicas de supervivencia.

Asistimos a la elección del líder por desafío, algo que Lynch obvió, y que repercute enormemente en las relaciones de Paul con los Fremen. Observamos cómo la Especia cambia el carácter de Paul, preguntándonos qué son esas pastillas que parece masticar sin descanso, y que sustituyen a su comida... y que no es otra cosa que Especia con Paul cada vez más adicto a ella. También somos conscientes de lo que el agua significa para un Fremen al utilizar éstos una técnica para absorber toda el agua del cuerpo de un muerto, y así poder reciclarla para la tribu. Sabemos de las relaciones entre las Casas, de las atrocidades sanguíneas, y de las orgías sin fin en la Casa de los Harkonnen. Somos conscientes del importante papel de las concubinas (una ausencia totalmente lamentable en la película de Lynch), por encima de las relaciones de interés para mantener el control de la Especia y que ésta "fluya".

Sabemos que el agua de la vida, una vez cambiada por la Reverenda Madre, tiene propiedades afrodisíacas que son aprovechadas por la tribu en una orgía bastante descriptiva. En definitiva, somos conscientes de la complejidad de la historia, y de la riqueza de este mundo, para nada inferior al creado por Tolkien en su obra capital, El Señor de los Anillos.

Sólo por eso, esta miniserie puede considerarse una aportación interesante y a recuperar, y más sobre todo ahora que tenemos la oportunidad de encontrarla en una muy buena edición en DVD.

Graeme Revell, música para un Fremen

La partitura de Revell para la miniserie está ajustada a las imágenes imponiendo su estilo de búsqueda de nuevas sonoridades casi siempre próximas a sonidos más tribales que convencionales. De ahí que el mayor esfuerzo del compositor para la partitura haya sido dotar a los Fremen de un tema principal a la altura. Y de hecho lo consigue. El principal problema que encontramos en la partitura del compositor es la ausencia total de ese sabor "épico" que impregnaba cada nota de la partitura de Toto, y por supuesto de la de Brian Tyler para "Children of Dune".

Hay momentos en que Revell desaparece de escena, siendo esta sensación más que evidente en aquéllas donde debe de hacerse no sólo más presente, si no protagonista absoluto, ya sean los ataques de los Fremen a los transportes de Especia del Emperador, o en la batalla final. Además la partitura evidencia una falta de variación temática realmente alarmante para la multitud de mundos, personajes y situaciones que aparecen durante toda la duración de la miniserie (que recordemos, es superior a la película de Lynch por lo que también existen más oportunidades de crear música, y hacerla más rica en matices).

Así, la partitura de Revell varía de situaciones bastante conseguidas a otras con falta de garra, anodinas, intrascendentales... donde la aportación de la música se ve insuficiente. Esto conlleva a que si en una audición con las imágenes es algo evidente, en una escucha aislada, el problema se agrava, sintiéndonos partícipes de una composición descriptiva, casi de documental, donde lo melódico tiene contadas apariciones y no digamos lo exagerado.

Eso sería bueno en algunas partituras, pero no para una que intenta describir el mundo de Dune, lleno de grandiosidad y de excesos.

De este mar de excesiva tranquilidad que es el CD de Revell, podemos rescatar algunos oasis musicales. Y no es para menos en una partitura muy larga, al igual que su edición discográfica.

1. Main theme: El título de Dune se escribe en la tierra, resquebrajándose y cayendo a un vacío sin fin. El primer tema que utiliza Revell es el de la Casa Atreides, para después pasar al tema de Dune, del desierto, caracterizado por un sonido más tribal. Un gran tema que dirigirá el resto de la composición.

2. Pain Box: Apoyado en un sintetizador con sonidos bastante densos, el recurso musical es idéntico al de Toto para la película de Lynch, salvo por la evidente variación en la composición. A nivel musical la efectividad está fuera de toda duda y es que Revell si en algo destaca es en crear atmósferas.

3. Desert Trek: Paul y su Madre caminan por el desierto. El tema de Revell está basado en una instrumentación árabe, tal como haría en El Cuervo. Es un tema descriptivo, pero alejado de toda la belleza que se le supondría aquí.

4. Travel With Fremen: Es similar a Desert Trek, pero con una instrumentación más viva, también de la misma tonalidad árabe. Aquí Revell aporta el tema de los Fremen, perfectamente acoplado a su naturaleza de habitantes de las arenas.

5. Fremen Village: Es el momento más tribal de la partitura y el más próximo a "músicas del mundo". Un toque eminentemente árabe, eso sí, con la habitual contención en la composición.

6. Paul & Chani: Este tema de amor es básicamente el tema de Dune, y el mismo que podíamos escuchar en los Main Titles, pero en un aire más evocador. El porqué de su utilización antes de que Paul encontrase a Chani se explica en las visiones de futuro que tenía éste antes de conocerla.

7. Conquering the Worm: Aquí podemos hacer una extrapolación en cuanto a que estamos en situaciones iguales, tanto en la película de Lynch como en la miniserie. Paul ha domado al gusano y está dirigiéndolo. En la película de Lynch ese momento es uno de los mejores a nivel de composición musical. Aquí Revell aporta un sonido progresivo, acompañado de la sempiterna instrumentación arábiga. La música se acelera y aparece el tema de Dune. Después el descontrol total, sonidos árabes por doquier. ¿Efectivos con las imágenes? Del todo. ¿Disfrutables en una escucha aislada? Bien, pero no tanto. A pesar de todo es uno de los grandes momentos de la composición de Revell.

8. Paul Drinks: Paul bebe el agua de la vida. Casi toda la instrumentación tribal ha desaparecido para encontrarnos con unos efectivos coros. Y no es para menos, el agua de la vida no ha sentado precisamente bien a Paul, o desaparece o se convierte en un Dios.

9. Paul Reigns: Otro de los mejores temas del disco. Las sonoridades continúan del tema "Paul Drinks" para posteriormente potenciar la percusión tribal acompañada de los coros sobrenaturales.

10. The Killing of the Innocent: Uno de los pocos temas de acción estrictamente hablando. The Killing of the Innocent se basa en una poderosa percusión en varios niveles orquestal, electrónica y tribal.

Lo Mejor: La instrumentación árabe.

Lo Peor: La excesiva falta de fuerza, épica, y espectacularidad.

El Momento: Paul Reigns.

Children of Dune

Compositor : Tyler, Brian
Año : 2003
Distribuidora : Varese Sarabande

Breve Análisis

Antes de entrar de lleno con la partitura de Tyler sólo comentar varios puntos. Children of Dune representa por parte de la productora Hallmark, número uno en cuanto a miniseries televisivas, la reorganización de casi todo el grupo artístico y técnico de la primera miniserie que había sido dirigido por John Harrison. Tenemos un cambio de director que ahora es Greg Yaitanes, con el que Brian Tyler ya había trabajado en Plan B, y que era autor de varias series de televisión, entre las que destaca "C.S.I.:Miami".

Los actores principales son exactamente los mismos, así como parte del grupo técnico, que de nuevo tiene su mayor grueso en Praga. John Harrison deja las labores de director pero no la de guionista y coproductor. Esto es un gran cambio, más que nada porque Yaitanes es muchísimo mejor director que Harrison, y eso se nota nada más ver que Brian Tyler es el elegido para dar música a esta epopeya.

Children of Dune reúne el segundo y tercer libro de la saga de Frank Herbert tomando el título del tercero. Si queréis ver un trailer de lo que os espera, si cualquier cadena española le da por estrenarla, o cualquier productora de editarla en DVD, pasaos por aquí:

http://www.apple.com/trailers/sci_fi/children_of_dune/

Bryan Tyler es el Kwisatz Haderach

Impresionado me quedé la primera vez que escuché la partitura de Tyler para esta miniserie. Un amigo de nuestra lista de correo me mandó un enlace donde poder escuchar un adelanto de lo que sería una nueva entrega musical del universo de Dune, a cargo de un compositor que parecía prometer mucho, pero del que poco había oído hablar (salvo por Vampires: Los muertos).

Nada más escuchar dos temas de esta partitura (dos temas incompletos) tal fue mi entusiasmo que me dispuse a pedir una copia vía Internet (uno no es de capital) para recibir esta maravilla cuanto antes. Una vez en mis manos no sólo confirmé lo que había oído, sino que Children of Dune superó de lejos mis más entusiastas expectativas. Y es que uno ya está hecho a escuchar muchas bandas sonoras y no todo le llega. El caso es que Children of Dune es una gran banda sonora, pero uno no observa todas sus virtudes hasta que no ha podido desgranar su música y ver que el esfuerzo de Tyler ha sido mayor que el de cualquier compositor de cine. Y es que Tyler, antes de nada, es un aficionado a la ciencia-ficción y un autentico fan del universo de Frank Herbert para Dune. Es por eso que se puede explicar el porqué de tanta implicación en una partitura que le ha supuesto, agarraos chicos, componer en 6 semanas, ¡¡174 cortes en COD!!. Para que os hagáis una idea, el CD dura un poco más de 70 minutos y sólo trae ¡36 cortes! Para aquellos aficionados a la composición que estén empezando ahora, esto les sonará "terrorífico".

¿Y por qué tanta cantidad de música en tan poco tiempo? Aparte de por el metraje, por un concepto que rara vez se ve en una profesión a día de hoy... Motivación. Esto sería lo único que explicaría, además del trabajo milimétrico, el porqué de que Tyler asumiera la planificación exhaustiva de la percusión recopilando multitud de instrumentos de todo el mundo o que crease una serie de letras para pasajes musicales en su partitura, agarraos de nuevo, escrito directamente en la lengua Fremen. Por lo tanto para valorar en su justa medida esta composición, no vale con escuchar la música y decir: "Vale, es bonita, me gusta" o, "Vaya peñazo, es insoportable". Pues no, tenemos que ser capaces de ponernos la piel de un compositor que ha asimilado tanto el mundo de Dune que es capaz de estudiar la musica desde las raices, hacer una extrapolacion musical a las raíces de un mundo imaginario, y además, escribir en su lengua materna, en la lengua de los Fremen.

Si aparte de todo esto el señor compositor, que en este caso es Tyler, es capaz de componer una partitura que te haga vibrar, que aporte una variación temática necesaria para cada matiz de la historia o personaje, que tenga la fuerza que se le pide a una composición de esta índole, y que además soporte la presión de cualquier malévola comparación a otras partituras, véase Gladiator (cuando la instrumentación de Children of Dune está mucho más justificada que en Gladiator, siendo la misma) o anteriores sobre la misma saga como la de Toto, creo que sin ninguna duda estamos ante una gran partitura, una de ésas que marcan un punto y aparte en la carrera de un autor.

Y no nos engañemos, esto es lo que es Children of Dune, el punto más alto de la carrera de Tyler.

Valoración Temática

Tyler estuvo componiendo la partitura con un esfuerzo sobrehumano, ya que supervisaba las orquestaciones y la grabación de la orquesta en Praga (una orquesta de 95 miembros), dirigiendo a través de un monitor vía remota, para después complementar lo grabado allí con grabaciones adicionales en Seattle. Después de grabar con la orquesta, añadió la percusión creada por él mismo, aparte de las voces (por cierto, las masculinas pertenecen a la garganta del gran Brian Tyler... ¿Hay implicación? Vemos que sí). Tal fue la efectividad de Tyler que en sólo 6 semanas pudo hacer todo esto, y tener la productora el material mucho antes de tiempo, lo que le permitió utilizar la música de Tyler para diversos promociónales de la miniserie.

Por una vez no valorare los temas paso a paso, y lo siento por los que prefieren este análisis. La razón es clara. Esta miniserie todavía no ha sido estrenada en España y hacer una valoración corte a corte con asignación a las imágenes se presenta como algo que no favorece para nada el factor "sorpresa" de una miniserie que recomiendo a todos. Tal vez en otro momento. Algo que si haré es recopilar los mejores temas, según su función especifica en la banda sonora. Eso sí, os aviso de que la partitura que escuchamos en el CD ya ha sufrido una criba previa (¿Recordáis lo de 174 cortes?), por lo tanto, toda la música y todos los cortes del CD son del todo aprovechables, y los que menos nos pueden gustar son los "menos buenos". Avisados quedáis.

- Los mejores cortes:

El mejor: Sin lugar a duda el tema estrella del disco es Inama Nushif (Montage). Tal vez éste es el que más recuerde a los aficionados a la composición de Zimmer para Gladiator, por la voz femenina y claro sonido "new age". Es un tema evocador con una belleza palpable desde las primeras notas, y que aparte de en la comentada voz, guarda su "magia" en la especial percusión de Tyler que se hará obligatoria en todo el entorno musical de Dune.

El más tribal: "The Fremen Quizarate" es el que más se aproxima a las sonoridades ideadas por Revell en la primera miniserie (lo que demuestra la cohesion de la saga) y donde la percusion de Tyler viaja por el desierto con total libertad.

El más distinguido: "Main Title (The House Atreides)". Los dos anteriores compositores, tanto el grupo Toto como Graeme Revell, tuvieron el acierto, o la necesidad, de crear un tema para la casa de Paul, la casa Atreides. Todos coincidieron en dotar a este tema de una tonalidad de evidente "nobleza", no por nada la Casa Atreides es una simbología de lo que es la monarquía en nuestro mundo. Tyler reincide en esas sonoridades más señoriales, pero aportando una chispa de más "heroicidad" al tema, supongo que por la verdadera situación de la Casa Atreides en el trascurso de la acción en Children of Dune, donde los Atreides han conseguido, gracias a su valentía, hacerse amos de un universo totalmente decrépito y gobernado por la tiranía y la corrupción del Emperador.

El de la mejor percusión: "Trap The Worm" es una clase maestra de cómo la percusion puede aportar sonoridades melodicas. No olvidemos que este tema parte además con un añadido que no es otro que la utilización a modo de fondo musical del "Prophecy" de Brian Eno, algo que se repite en más temas de la partitura. Tampoco nos olvidemos del corte titulado "The Desert Journey", con similares planteamientos estilísticos.

El más "Tyler": "Children of Dune" es un tema que nos recuerda bastante según la tonalidad en que nos lo muestra Tyler a aquellos momentos más calmados de Bubba Ho-Tep, de ahí que tenga más reminiscencias con su especial sonido.

El más evocador: "Farewell" es un recorrido a modo de despedida del score de Tyler. Un tempo mucho más calmado y ciertamente evocador, aunque no desligado de cierta tristeza, y es que como comprobareis al ver la miniserie, este "Children of Dune" es un relato donde la tragedia es la protagonista y los personajes se debaten en un sinfín de preguntas sin respuesta.

Children of Dune es un score redondo, tal vez uno de los mejores scores que ha dado la televisión, si no el mejor (con permiso de Merlín de Trevor Jones, o Mists of Avalon de Lee Holdridge). Tyler es capaz de capturar la esencia de sus scores previos para la misma saga. La garra, la fuerza, y la variedad temática de lo compuesto por Toto, y lo tribal, lo tradicional y la instrumentación insólita de Revell para la miniserie de Dune.

Así, Tyler desarrolla toda la partitura de una tonalidad más noble, aristocrática, formal, propia de la casa Atreides, para después desembocar en el camino de los hijos de Dune (en especial Leto II, el hijo de Paul) por el desierto, donde la percusión y lo místico impregna los sonidos al igual que la Especia lo hace con ese aire.

Tyler gracias a este score se ha convertido en un "fan favourite", y cada nueva asignación es seguida con especial interés por los aficionados, sólo hay que ver su ideal trabajo para Timeline.

Un punto y aparte en su carrera que responde a una comprobada calidad en todos los aspectos de su composición, algo que nos obliga a considerar a Children of Dune, un trabajo excepcional de compra obligada por cualquier aficionado al compositor, o al genero fantástico, y por extensión al coleccionismo de música de cine.

La mejor epopeya musical

Vs.

Vs.

• Originalidad:
  • Dune: Por originalidad, la partitura de Toto se lleva el premio, más que nada por ser la primera, y además por romper con todo el pasado relativo a viajes espaciales o mundos inventados. Las sonoridades creadas por Toto distan mucho de las utilizadas por Williams en Star Wars, o de los segmentos clásicos de 2001. Toto utiliza sin ningún miedo la Guitarra eléctrica en una composición cinematográfica, además de buscar sonoridades únicas en cuanto a la magnífica percusión planificada por Jeff Porcaro, poniendo como ejemplo el sonido mimético de los cuchillos al cortar el aire. Eso sí, Toto no parte de una originalidad absoluta, sólo hay que ver que Lynch le marcó la séptima de Shostakovich como precedente a seguir... 7.5
  • Frank Herbert's Dune: Para muchos la aportación de un sonido árabe para casi el 80% de la partitura podrá suponerles algo muy original. No para el que escribe. De toda la partitura no destacaría nada que la diferenciara del resto de partituras de ciencia-ficción, y sobre todo del autor. Tal vez ese exceso de instrumentación "regional" pueda considerarse único en Dune, pero Toto ya despuntó algo en su composición, aunque eso sí, tocado muy de soslayo. Por todo eso Revell no fue un dechado de originalidad porque esos sonidos ya los había utilizado en The Crow o The Siege por citar algunos ejemplos... 3
  • Children of Dune: Hay algún que otro elemento original en la partitura de Tyler, aunque es el que más en desventaja se sitúa por tener dos precedentes musicales sobre el universo de Dune. A pesar de eso, Tyler es capaz de crear un sonido propio, consistente, basado, sorprendentemente, en la fusión de lo mejor de cada partitura anterior, así como de su estilo personal. Así, Tyler toma la variación temática del Dune de Toto, más el tema de Brian Eno, la instrumentación árabe de Revell, rescribiéndola y tamizándola a su propia y magnífica percusión, y por supuesto su especial sensibilidad para crear melodías. La gran aportación de Tyler a este apartado es la creación de letras para los mejores momentos de la partitura compuestas en Fremen, literalmente. Una decisión nunca antes tomada y que beneficia el conjunto no sólo en musicalidad sino en cohesión de forma excepcional... 7
• Instrumentación:
  • Dune: La instrumentación de Toto es muy variada, aunque ciertamente un poco limitada, no por los conocimientos musicales, sino por el numero de miembros de la orquesta de Viena. De todas formas es una partitura con coros, guitarras, batería, bajos, teclados, orquesta, la instrumentación es muy variada y muy bien utilizada... 7.5
  • Frank Herbert's Dune: Ésta es una de las mejores facetas de esta partitura. Sin ser un dechado de virtudes en cuanto a instrumentación o un modelo a seguir, Revell pasa por varios instrumentos de origen árabe, además de por el sintetizador y aportaciones (muy limitadas) orquestales. Su utilización es muy correcta aunque poco variada... 6
  • Children of Dune: Es uno de los puntos fuertes de la partitura. Multitud de instrumentos, todo ellos elegidos por el propio Tyler, una orquesta a la altura y una voz evocadora. Y ya no hablemos de los teclados y sintetizadores. Hay un montón de aportaciones en cuanto a instrumentación que brillan por su efectividad y por la variedad que ello aporta a la partitura. Pero lo mejor de todo es que no hay ningún instrumento que chirríe, o que se vea fuera de situación. La cohesión musical es asombrosa y evidencia una maestría sorprendente para un compositor tan joven... 9
• Variación Temática:
  • Dune: Impresionante. Eso es básicamente lo que podemos decir de esta composición en cuanto a aportación de temas: Dune, los Fremen, Paul, Leto, El amor de Moad´dib y Chani, el Barón Harkonnen, otro tema de amor, un tema para el desierto, temas específicos para la acción. Se nota que Toto es un grupo de rock/pop, y que hay varias cabezas pensantes que aportan una variedad musical inusitada. Dune es una de esas películas donde la banda sonora tienen una importancia decisiva y Toto a sabiendas de ello aporta una variedad temática tan extensa que brilla con luz propia en el panorama de música de cine... 9.5
  • Frank Herbert's Dune: Realmente decepcionante para un universo con tantos matices y aportaciones visuales. Sinceramente, el Tema principal de Dune es bueno, pero tampoco llega a la altura de ninguno de los que han creado Toto o Tyler. El Tema de los Fremen no está del todo definido y es más un cúmulo de instrumentación árabe que un tema con unos planteamientos concretos. Viéndolo así, ésta es una de las lagunas más descaradas del score de Revell, aunque ciertamente la creación temática no es uno de los puntos fuertes del compositor... 4
  • Children of Dune: Muy rica en matices, ciertamente no llega al nivel de variación temática que tiene Dune de Toto, pero tiene una serie de temas realmente conseguidos. En total son 3 temas realmente importantes con sus variaciones, sus propios matices y su correspondiente y totalmente diferente instrumentación. Destaca el tema de Dune al que Tyler llega a retorcer y desgranar consiguiendo así varias interpretaciones muy disfrutables... 8
• Percusión:
  • Dune: En este apartado tenemos una fiera lucha por parte de las tres composiciones. La percusión de Toto para Dune es de libro. Jeff Porcaro es un percusionista nato labrado en mil batallas. El estudio que realiza de la percusión para esta partitura podría asimilarse a la que ha realizado Tyler. Destaca la efectiva e intensa percusión de las batallas y sobre todo el duelo entre Paul y Feyd. Sin duda, una percusión de altura... 9
  • Frank Herbert's Dune: Uno de los aspectos más destacables de esta partitura es la percusión tribal que Revell aporta a los Fremen, es el motor de la composición en todo momento, aunque también es cierto que falta la fuerza y la viveza de sus dos oponentes... 7
  • Children of Dune: Excepcional. El trabajo en cuanto a percusión de Tyler es uno de los mejores del compositor en su larga y prometedora carrera. Tyler no sólo ha aportado una variada inusitada de percusión, sino que además ha investigado en el uso de ésta para obtener una serie de sonidos que pudiesen asociarse a golpe musical con los Fremen y el mundo de Dune. Destaca la percusión de "Trap the Worm" donde el tema de los Fremen tiene una excepcional fuerza y donde se demuestra que se es capaz de hacer melodía con el uso exclusivo de la percusión... 9.25
• Imagen / música:
  • Dune: El principal problema que a día de hoy se encuentra Dune y por extensión la partitura es la nefasta mezcla de diálogos, FX y partitura que tiene la película. De ahí que este apartado se vea muy perjudicado por este innegable hecho. De todas formas si nos centramos en su función estricta, la partitura de Dune sorprende en cuanto a cohesión. ¿Y por qué debería de hacerlo? Recordad que Toto es un grupo debutante en el mundo de la composición de partituras para cine, y que eso casi siempre ha conllevado que el grupo o solista en cuestión buscase ciertamente un protagonismo por encima de las imágenes y por extensión, una deficitaria cohesión imagen-música. Hay momentos colosales como la doma del gusano por parte de Paul o la lucha de Paul con Feyd, por poner sólo algún ejemplo... 8
  • Frank Herbert's Dune: Como hemos dicho en la reseña de esta partitura, salvo en las escenas en que se pedía más aportación espectacular del compositor, el resto se acopla perfectamente a las imágenes, tanto que a veces da la sensación de no haber escuchado nada de partitura, cuando en verdad sí existe... 7.5
  • Children of Dune: La miniserie de Children of Dune es mucho más espectacular y mejor realizada que la miniserie precedente. Esto beneficia tanto a la imagen como a la música, pues la fusión de ambas da un resultado exitoso sin lugar a dudas. La música queda perfectamente, destacando el tema de "Inama Nushif (Montage)"... 8
• Bonus: En esta sección establecemos aportaciones a la nota final gracias a distintos sucesos, fuera de la composición en sí, o dentro de ella gracias a autorreferencias, referencias a otras obras, u homenajes claros. En fin, cualquier suceso que sea digno de reseñar y al que no hemos hecho referencia anteriormente.
  • Dune: Un Bonus decisivo para la nota final es la capacidad de Toto para llevar a cabo su debut en pantalla grande. No creo que quede duda en ningún aficionado en cuanto a lo resolutivo de este trabajo. Toto cumple a la perfección y eso que la presión era elevada tratándose de una adaptación de un libro de culto, y de una película con tanto dinero en la producción. Muchos nos preguntamos por qué el grupo no se decidió a componer otra banda sonora... + 0.5
  • Children of Dune: La referencia al tema "Prophecy" de Brian Eno para la película de Lynch es todo un punto a su favor, y su utilización sin ser algo demasiado evidente aporta un juego musical al aficionado que no ocurre todos los días. No olvidemos tampoco toda las miradas que tenia puesta en él después del magnífico trabajo de Toto... + 0.55

Estudio dedicado a Paco Pulido.

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El apartado "El Libro", realizado por Lorenzo Cruces