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Bless the Child

Bless the Child


Compositor: Young, Christopher
Año: 2000
Distribuidora: Crescendo
Duración: 53:15

Excelente
Tracklist:
  1. Introitus (Entrance) (08:28)
  2. Kyrie Eleison (Lord Have Mercy Upon Us) (11:53)
  3. Dies Irae (Day Of Wrath) (12:48)
  4. Agnus Dei (Lamb Of God) (13:22)
  5. Lux Aeterna (Eternal Light) (06:44)

Recuerdo pocas películas de terror que me hicieran sentir mal en un cine, y no precisamente por sus virtudes. A veces el culpable es el espectador, y más cuando hay un abanico tan amplio de ofertas cinematográficas para tener que elegir las peores. Si dijésemos que no hay información sobre estrenos cinematográficos, por lo menos tendríamos una excusa, pero no es el caso.

Por lo tanto reconozco mi culpa al entrar en el cine y ver The Crow II: City of Angels (parece mentira que esta película tenga guión de David Goyer, el mismo de las magistrales Dark City o Batman Begins), el quedarme dormido viendo The Haunting (obviamente el remake de Jan de Bont), o el salir con cierto mosqueo de ver la peli que nos ocupa, Bless the Child.

Bless the Child tal vez no es la peor película de la historia, ni tampoco es tan mala como yo pretendo verla (El Fin de los Días, de temática similar, puede parecer  peor), pero no sé qué ingrediente especial de ella me produce alergia.

Pero a pesar de ello, esta película confirma que el mundo de la música de cine posee bastante carga de ironía, cuando una película sin ser nada del otro mundo, posee una partitura que es ejemplar. Y eso es lo que hizo Christopher Young para esta película, en la que para el que escribe es una de sus mejores composiciones.

Y es que la partitura de Young es maestría en estado puro. Densidades sonoras trabajadas y medidas en una de las composiciones que, de estar en otra película de mayor entidad (véase La Profecía o El Exorcista), habría disfrutado de mucho más reconocimiento y promoción.

Cinco son las suites en las que Young distribuye su composición. Estas cinco suites tienen una extensión variable, pero la que menos minutaje presenta está en torno a los 7 minutos.
Esta decisión de la edición discográfica de Crescendo (una discográfica que ha hecho mucho por el mundo de la música de cine, en especial por las series de televisión fantásticas de culto), podría resultar tediosa en una escucha final, pero nada más lejos de la realidad. Los temas son densos, atmosféricos y oscuros, pero eso no conlleva en lo más mínimo que una duración excesiva en esta línea pueda aburrir al oyente, mientras haya una composición variada y medida que la sustente.

El primer corte, "Introitus (Entrance)", establece ya los parámetros que seguirán a lo largo de la partitura. Este corte de ocho minutos va dando pequeñas pinceladas de oscuridad que explotarán definitivamente en el segundo corte "Kyrie Eleison (Lord have mercy upon us)". La masa orquestal se mantiene ciertamente apaciguada, elevada en ciertos momentos por los omnipresentes coros religiosos. Pensemos en esta partitura como una misa negra, con ciertos toques de luz. Esta luz es más que evidente en la parte final de este segundo corte, con un crescendo del tema de Kyrie.

"Dies Irae (Day of Warth)" revoluciona el sentido oscuro de la partitura, y introduce golpes de efecto de la orquesta. El sonido es más incidental  y menos solemne, es la maldad en estado puro. La percusión se muestra como protagonista dejando en un segundo plano a los coros que se presentan como un instrumento secundario más, limitando considerablemente su participación. Aquí podemos encontrar al Christopher Young de Urban Legend o Species aunque con más inspiración melódica.  El corte finaliza de igual forma que el segundo, con un rayo de luz cayendo sobre la composición.

"Agnus Dei (Lamb of God)" se presenta como el corte más melódico y luminoso del compacto en sus dos primeros minutos. A partir de este momento, el compositor establece un punto de inflexión donde de nuevo, retoma la atmósfera oscura y malsana, con cierta tensión musical sin elevar demasiado el nivel de la orquesta, preparándose sutilmente para dar lugar a unos nuevos golpes de efecto a eso de los cinco minutos. Las flautas retoman el ambiente contenido, creando un conjunto musical que va envolviéndose y creciendo hasta sucesivos crescendos, apaciguados por numerosos golpes de efecto. A partir del minuto diez, un bello violín hace acto de aparición para presagiar que el lado luminoso tiene mucho que aportar, incorporándose a él de nuevo los coros. Al final del corte el mensaje musical es claro: los coros agudos celestiales mantienen una lucha contra los graves y maléficos de la oscuridad, sumándole una percusión aislada pero contundente. Esta continua lucha musical que Young establece entre la oscuridad y la luz es el elemento más interesante de su composición.

Anthony Scales"Lux Aeterna (Eternal Light)" festeja la victoria del bien sobre el mal. Este corte empieza cantado por una voz infantil solemne y luminosa. El elemento oscuro no deja de desligarse de toda la composición, incluso durante esta victoria del bien sobre el mal. El coro retorna a la fase final del compacto, aportando calma, pero cierta sensación de desasosiego. La orquesta, con cierto sentido optimista acompaña a este coro en los últimos minutos del corte, en un obligado crescendo final.

Una vez terminada la audición, uno evidencia la buena labor de los colaboradores de Young, con una magníficas orquestaciones de Pete Anthony, John Bell y el propio Young entre otros, los estupendos músicos de la London Metropolitan Orchestra, entre los que destacan el barítono Anthony Scales (con unos magníficos solos), o los niños Dominic Brown y Oliver Paton.

Una partitura exquisita, trabajada y con un nivel profesional que se evidencia en la primera escucha. Un Young obligado que junto a sus dos trabajos para Hellraiser presenta aquí su mejor baza para un género en el que es uno de los reyes: el terror.

Lo mejor: La lucha musical entre el bien y el mal, muy bien representada por el compositor.

Lo peor: Que una película tan mala haga olvidar una partitura tan buena.

El momento: Lux Aeterna

DDBSpawn (David Doncel)

 
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