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Antoine Fuqua (realizador de Asesinos de Reemplazo) parece que tiene cierta fijación con los chicos de Media Ventures. Para su primera película contó con la colaboración de Harry Gregson-Williams en el apartado musical, y ahora, con Bait, ha elegido a Mark Mancina, sin duda teniendo en mente su trabajo para Dos Policías Rebeldes. Porque, y es difícil no darse cuenta de ello, la película intenta por todos lados imitar a la, para mi gusto, pésima cinta de Michael Bay, mezclando para ello secuencias de acción con chistes facilones y, seamos sinceros, sin pizca de gracia.
Pero vayamos a lo que nos interesa, la música de Bait. Durante los títulos de crédito iniciales ya se puede adivinar cuáles son los derroteros por los que transcurrirá la partitura de Mancina: ritmos y más ritmos aderezados de vez en cuando con apuntes orquestales. En principio resulta una decepción, ya que en pocas ocasiones Mancina ha tenido los primeros minutos de una película enteramente a su disposición, por lo que pienso que debería haberlos aprovechado más. Luego llega lo peor, esa música de tipos graciosos que tanto abunda en Dos Policías Rebeldes y que aquí se hace tan insoportable como el protagonista cuando va de listo. Sin embargo, a los pocos minutos escuchamos por fin un tema que demuestra lo bueno que es el compositor de Twister con los momentos de acción (para los que tengáis el disco promocional, me estoy refiriendo a "3. What Are You Doing?").
Mancina no sólo logra acrecentar la intensidad de las secuencias rodadas por Fuqua, sino que adapta muy bien su música a las acciones de los personajes, situación que se comprueba sobre todo en la escena final en el hipódromo. Durante el metraje también se oye un tema de amor que dista de ser el mejor que haya compuesto este autor, pero al menos es digno y no provoca sarpullidos. Sin embargo, uno de los temas que más me gustan es "18. To the Rescue", donde Mancina consigue capturar el dramatismo de una escena en la que una bomba está a punto de explotar. Atención a la breve fanfarria que se escucha cuando Alvin entra en el vehículo para alejarlo de su novia, suena a Media Ventures total y, por tanto, es poco original, pero su efectividad es digna de todo elogio.
En resumen, partitura funcional plagada de momentos espléndidos que, sin embargo, se ve lastrada por un buen número de ritmos y musiquillas que, seguramente, el director pidió al compositor. De hecho, Fuqua y Mancina han vuelto a colaborar en Training Day.
Lo Mejor: Otra nueva muestra de lo bien que se desenvuelve Mancina en el mundo de la acción.
Lo Peor: La música que describe las "gracias" de Alvin.
El Momento: La furgoneta con la bomba; Mancina sabe crear la tensión adecuada con su partitura.
Jorofer
http://www.galeon.com/markmancina
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