Dark Souls

Para los que desconocen la franquicia, nos encontramos frente a un juego de rol creado por japoneses pero con temática occidental, dejando de lado la estética manga y los combates por turnos para sumergirnos en un pseudo mundo abierto con temática fantástico-medieval donde tenemos una misión principal, lugares que descubrir, muchísimos enemigos con los que acabar, enemigos finales enormes en dificultad y tamaño, y un letrero que dice “HAS MUERTO” que veremos un número indecente de veces.

Comenzaremos la aventura creando nuestro alter ego eligiendo el sexo, el aspecto físico y la clase, aunque a la hora de la verdad solo servirá para empezar con unos valores determinados más elevados que otros.

Una vez acabemos el tutorial y por fin nos “suelten” (literalmente, cuando juguéis lo entenderéis) en el mundo de Dark Souls, tendremos a nuestro alcance un mapeado enorme, lleno de entornos de lo más variopintos, que se unen entre si por medio de atajos, que deberemos ir desbloqueando. Tendremos que pasar por un castillo, un bosque, un lago con un simpático huésped, una ciénaga, unas catacumbas, y más sitios que no quiero destripar para que os llevéis la sorpresa al descubrirlos por vosotros mismos. A lo largo de la aventura nos iremos encontrando con personajes que al igual que nosotros están encerrados en este mundo, y que nos abrirán una serie de misiones secundarias más interesantes que la propia misión principal.

En resumen, horas y horas de exploración, descubrimiento, enfrentamientos épicos y un concepto de juego que ya no se estila pero que te hace estallar de alegría cada vez que acabas con un enemigo, descubres una zona nueva o simplemente subes de nivel.

Metiéndonos de lleno en el terreno musical, los de From Software han decidido cambiar al anterior compositor, Shunsuke Kida, y en su lugar han escogido a una auténtica bestia parda de la composición japonesa, nada más y nada menos que Motoi Sakuraba.

Este señor, japonés de nacimiento (de la prefectura de Akita para más señas), ha tenido el placer de crear maravillas tales como la saga Star Ocean, la saga Shinning Force de la extinta Saturn, la saga Valkyrie y la longeva saga Tales of…, amén del famoso Rogue Galaxy, uno de los últimos pelotazos de la ps2.

Viendo este curriculum, nos hacemos una idea de lo preparado que está este señor para los mundos de aventuras épicas, aunque en este Dark Souls ha tenido la oportunidad de explorar un lado más oscuro de este universo, y así ha logrado plasmarlo en su creación.

Nos encontramos una banda sonora compuesta por 23 temas, 21 de los cuales están dedicados a los enemigos finales de cada zona, temas absolutamente épicos y lúgubres a partes iguales. En los momentos de más calma (pocos, realmente pocos), iremos de la mano de unas melodías más suaves, pero sin hacernos abandonar en ningún momento la sensación de soledad, tristeza y abandono que produce este juego, una atmósfera realmente conseguida.

Algo bueno para los amantes de este compositor, es que teniendo acceso a la edición especial del juego contaremos en su haber con la banda sonora en formato físico.